En México se han aplicado desde hace ya más de una década programas federales dedicados a la conservación del águila real, pese a lo cual la especie (Aquila chrysaetos) está “amenazada”.
El término “amenazada” se aplica a especies de flora o fauna que podrían desaparecer a corto o mediano plazos si siguen operando los factores que inciden negativamente en su viabilidad, al ocasionar el deterioro o modificación de su hábitat o mermar directamente el tamaño de sus poblaciones.
En un acto en Ciudad de México, el subdirector de especies transfronterizas de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, Jesús Lizardo, citó entre los factores que ponen en riesgo a estas aves la minería a cielo abierto, los parques eólicos y la infraestructura eléctrica.
De acuerdo con el funcionario, como parte del nuevo plan de rescate para el águila real se capacitará a grupos de vigilancia ambiental comunitaria en las zonas de distribución de la especie.
El subsecretario de gestión para la protección ambiental de la Secretaría del Medio Ambiente, Rafael Pacchiano, señaló en el mismo acto que se prevé también mejorar la colaboración con Estados Unidos para realizar un monitoreo de las águilas reales en América del Norte.
Detalló que lo que se intenta es que, a través del uso de dispositivos de rastreo que se colocarían a las águilas, se puedan identificar áreas de importancia para poblaciones residentes de México y migratorias de ambos países.
Según el funcionario, en México actualmente se tienen identificados 145 nidos y 81 parejas reproductivas de águila real, los cuales se distribuyen principalmente en regiones del norte y centro del país.
Los estados que mencionó fueron Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Nuevo León, Coahuila, Chihuahua, Jalisco, Durango, Querétaro, Guanajuato, Zacatecas, San Luis Potosí y Sonora.
Se anunció igualmente que en octubre próximo se abrirá un Centro de Conservación para esta ave, el cual estará ubicado en las instalaciones del parque temático Reino Animal en Teotihuacan, central Estado de México.
Al respecto, Eduardo Sánchez Navarro, director general del parque, agradeció el apoyo del Gobierno a este proyecto, así como de diversas empresas privadas que se han enfocado a la causa de rescatar al águila real.
Explicó que el Centro de Conservación, que se construye en una superficie de unos 6.000 metros cuadrados, tendrá una inversión aproximada de 12 millones de pesos (931.000 dólares).