Este anfibio se conoce como “rana danzante”, por el movimiento de las patas traseras de los machos durante el cortejo, y solo se encuentra en Western Ghats, una cordillera en el oeste de la India frente al mar de Arabia, dijo el investigador Sathyabhama Das Biju.
El trabajo científico lo ha dirigido este especialista en anfibios, un reconocido biólogo de la Universidad de Delhi, que ha estudiado durante doce años estas especies junto con Sonali Garg, K.
V. Gururaja, Yogesh Shouche y Sandeep A. Waljukar, expertos de diferentes centros científicos del gigante asiático.
El estudio publicado en “Ceylon Journal of Science” es fruto del trabajo de campo en los estados indios de Kerala, Tamil Nadu, Karnataka y Maharashtra, y para identificar las nuevas especies se ha analizado el ADN y las características morfológicas.
Las ranas pertenecen a la familia de las Micrixalidae y a un género único de la India denominado Micrixalus, del que hasta ahora se conocían otras 11 especies y cuyos orígenes se remontan a hace 85 millones de años, de ahí la consideración de “reliquias vivientes”.
Estos pequeños animales viven en corrientes rápidas de agua en las montañas, en un hábitat en el que durante los últimos 15 años se han descubierto 75 nuevos anfibios y se cree que puede haber un centenar de especies más aún por describir científicamente.
Sin embargo, este hábitat cada vez está más amenazado por la acción humana, por lo que las nuevas especies “requieren acciones inmediatas para su conservación”, ya que la mayoría viven en áreas sin protección medioambiental, advierten los científicos.
El trabajo científico ha puesto en evidencia que este hábitat “está altamente degradado y amenazado por la presión humana”, con consecuencias como la desecación de los arroyos vitales para la supervivencia de estas ranas consideradas “especies raras”.