Los científicos descubrieron que pueden hacer crecer neuronas de ratones en el tejido y luego observar cómo éste responde tras una herida, según el estudio publicado en los anales de la Academia Nacional de las Ciencias.
El tejido fue fabricado con dos biomateriales: “Un andamio esponjoso hecho de proteína de seda y un gel a base de colágeno más suave”, dijo el estudio. Los investigadores tomaron las neuronas de los ratones y las injertaron en el andamio, mientras el gel estimuló su crecimiento.
Si bien equipos de investigadores ya habían logrado hacer cultivos con colágeno o hidrogel, este tejido fue distinto porque vivió más tiempo —hasta nueve meses— y mostró propiedades mecánicas propias del tejido cerebral.
“Básicamente, se puede rastrear la respuesta del tejido tras la herida cerebral en tiempo real” , dijo David Kaplan, jefe de ingeniería biomédica de la Escuela Tufts de Ingeniería. “Lo que es más importante: se puede rastrear la reparación de este daño y lo que sucede a largo plazo”.
Si bien aún está lejos de ser una réplica de un cerebro completo y pensante, el tejido sí respondió de la manera que lo haría el cerebro cuando le cae un peso encima y los científicos pudieron observar las consecuentes actividades eléctricas y químicas.
También documentaron una “hiperactividad eléctrica transitoria consistente con las respuestas postraumáticas observadas” en un individuo vivo, de acuerdo con el estudio.
El estudio fue financiado por el centro estadounidense de bioingeniería Institute of Biomedical Imaging and Bioengineering.