Estas estructuras sedimentarias inducidas por microbios o MISS, que fueron halladas en una zona rocosa llamada Dresser Formation, situada en una remota zona de la región de Pilbara, “podrían ser la evidencia más antigua de la vida en la Tierra”, dijo el científico de la Universidad de Australia Occidental, David Wacey.
Investigaciones científicas previas derivaron en el descubrimiento de microfósiles y de estromatolitos de menor antigüedad que las estructuras sedimentarias halladas en Pilbara, según la cadena local ABC.
En ese sentido, el descubrimiento de este MISS hace que “las evidencias de las primeras formas de vida en la Tierra se sitúen unos cuantos millones de años atrás”, agregó Wacey.
“Cuando estos microbios estaban vivos interactuaban con los sedimentos en los que vivían y creaban pequeñas comunidades en las que se daba todo tipo de ayuda para sobrevivir en lo que habría sido un ambiente muy difícil”, describió el experto.
El científico explicó que el descubrimiento se caracteriza por incluir “fragmentos de microbios degradados en las que no se puede apreciar su forma original” porque ya que no se distinguen las células con claridad, aunque aún conserva material carbonoso que queda de ellas.
Las rocas sedimentarias donde se han hallado los restos de estos microbios probablemente son las “más antiguas y mejor preservadas de la Tierra”, destacó el científico al subrayar que el descubrimiento podría contribuir en áreas como la investigación espacial.
Algunos proyectos científicos se centran en la búsqueda de estructuras de microbios en la superficie de Marte para determinar si alguna vez hubo vida en ese planeta.