El acelerador convertirá al país en uno de los más equipados para investigaciones en la ciencia de los materiales y la nanotecnología.
La conclusión de las obras civiles del moderno complejo que es construido en la ciudad de Campinas y el montaje de los tres túneles de 235 metros de diámetro para los aceleradores será posible con los nuevos recursos liberados por el Gobierno para el proyecto, informó el Ministerio de Ciencia y Tecnología en un comunicado.
De acuerdo con el Ministerio, el Gobierno liberó la semana pasada otros 70 millones de reales (unos 17,5 millones de dólares) para obras en un proyecto cuyo costo total es calculado en 1.800 millones de reales (unos 450 millones de dólares).
Con los nuevos recursos asciende a 1.290 millones de reales (unos 322,5 millones de dólares) invertidos hasta ahora en el complejo que es construido en instalaciones del Centro Nacional de Pesquisa en Energía y Materiales (CNPEM).
Los nuevos recursos permitirán “la conclusión de las obras civiles en la edificación de 68.000 metros cuadrados (el tamaño de un estadio de fútbol) y el montaje final de los tres aceleradores”, según el comunicado.
La inversión también permitirá que en noviembre de este mismo año los responsables del proyecto puedan, al menos experimentalmente, poner a circular electrones en dos de los aceleradores, agrega la nota.
La circulación de electrones no permite por ahora realizar investigaciones con el equipo debido a que todavía será necesario generar un vacío similar al del espacio sideral dentro de los túneles de los aceleradores, una fase delicada y bastante costosa del proyecto.
Una vez concluido, lo que está previsto para 2020, el complejo será uno de los más modernos del mundo y le dará una posición destacada en Brasil en las investigaciones que exigen obtener imágenes de altísima resolución de estructuras como virus y proteínas o del suelo, las rocas o nuevos materiales.
El Sirus será capaz de emitir una radiación mucho más brillante y generar imágenes de mayor resolución que las obtenidas por el acelerador con que actualmente cuenta el estatal Laboratorio Nacional de Luz Sincrotrón (LNLS).
El nuevo equipo, que permitirá estudios de estructuras en escala atómica, molecular, microscópica o macroscópica, aumentará la capacidad y el número de usos, aplicaciones e investigaciones que ya se realizan en el UVX, el acelerador de electrones de segunda generación que Brasil opera en Campinas desde 1997 y que tiene 30 metros de diámetro.
La instalación contará con una fuente de luz sincrotrón con amplia franja de frecuencia de rayos luminosos y hasta 40 estaciones experimentales, casi tres veces más que el actual, lo que permitirá que sea ofrecido a investigadores internacionales interesados en realizar estudios en Brasil.
El Sirius permitirá que Brasil, el único país de América Latina que ya cuenta con un acelerador de electrones para investigaciones científicas, amplíe la capacidad y el número de usos, aplicaciones e investigaciones con estos equipos.