Tras la instalación del sistema se inicia ahora una fase de prueba que realizarán conjuntamente el personal del Observatorio Vaticano junto con la Universidad de Arizona, informó este jueves el centro de estudio de Astronomía de la Santa Sede, cuya sede se encuentra en Castel Gandolfo, al sur de Roma.
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Esto supone una importante mejora para el Telescopio Avanzado del Vaticano (VATT), explicó en un comunicado.
El moderno sistema automatizado que se le incorpora, creado por la empresa de ingeniería checa ProjectSoft HK y denominado ‘Don’, permitirá optimizar el control de “numerosos sistemas de apoyo”, como una estación meteorológica, la cúpula del telescopio, el entramado de aceite para los cojinetes hidráulicos de su montura o para el enfriamiento de su espejo primario.
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Por un lado, permitirá mantener el uso del telescopio con el modelo tradicional y “un astrónomo en el lugar hará que funcione”, pero “no tendrá que ir encendiendo y apagando cada subsistema del telescopio manualmente”, dijo el Observatorio Vaticano.
También “llevará menos tiempo alinear y enfocar la óptica del telescopio y apuntar los objetos en el cielo”, mientras que el paso siguiente para su desarrollo permitirá el uso del “modo remoto”, lo que facilitará a los astrónomos “trabajar desde sus ubicaciones, sin necesidad de ir al lugar” físicamente.
El principal telescopio del Observatorio Vaticano se podrá controlar desde la Santa Sede
Esto hará que los astrólogos del Vaticano puedan incluso controlar el telescopio desde el propio centro de estudios de la Santa Sede, situado en Castel Gandolfo, conocida como la residencia de verano de los papas, aunque Francisco no se ha trasladado a esa ciudad durante su pontificado.
“En el ‘modo planificado’, más sofisticado”, el sistema “ejecutará una secuencia de instrucciones preparadas por un astrónomo” lo que permitirá que VATT “funcione sin supervisión ni control humano directo”.
La instalación del nuevo entramado se hizo según el plan inicial, pese a algunos desafíos que incluyeron mal tiempo “y dos tormentas de nieve fuera de temporada a fines de marzo e inicios de abril”.
Esto hizo que el equipamiento se tuviera que trasladar hasta el Monte Graham de Arizona -donde está el telescopio- en excavadores con cadenas para nieve en los neumáticos.
Tras su instalación, que finalizó este miércoles, la fase de pruebas “avanza a toda velocidad” y “el futuro telescópico de VATT es prometedor”, destaca el Observatorio Vaticano, uno de los centros de astrología considerados entre los más potentes y más longevos del mundo.