El despegue estaba previsto para hoy en Florida (05H57 GMT) pero la NASA anunció su aplazamiento tras detectar “temperaturas de metano fuera de lo normal antes de introducir la carga de metano”.
La misión, bautizada IM-1, tiene programado enviar un módulo de aterrizaje de más de cuatro metros de altura desarrollado por la empresa texana Intuitive Machines, fundada en 2013.
El aparato debe despegar en un cohete SpaceX Falcon 9 desde el Centro Espacial Kennedy, en el sureste estadounidense.
Poco después del despegue, el módulo de aterrizaje debe separarse de la etapa superior del cohete y recibir energía. Luego debe establecer comunicación con la sala de control de Intuitive Machines, ubicada en Houston, Texas.
Este es “un momento crucial en la exploración espacial, donde las empresas privadas desempeñan un papel cada vez más vital” , dijo Intuitive Machines.
Se trata del primer intento de misión lunar encarado por esta empresa, pero el segundo en el marco del nuevo programa CLPS de la agencia espacial estadounidense NASA, que ha encargado a compañías privadas llevar equipos científicos hasta el satélite natural, con el fin de preparar el regreso de astronautas.
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En enero, la compañía Astrobotic no pudo llegar a la Luna debido a una fuga de combustible y su módulo de aterrizaje debió ser destruido deliberadamente en pleno vuelo.
La NASA asume el riesgo de fracaso de estas misiones confiadas a empresas jóvenes y subraya que es consciente de que no todas tendrán éxito.
Sin embargo, sostiene que el intento vale la pena: al ser un simple cliente a bordo de vehículos que no le pertenecen, la agencia espacial dice que puede enviar más material, con más frecuencia y por menos dinero.
Además de seis instrumentos de la NASA, el módulo de aterrizaje lunar también transporta seis cargamentos privados, incluidas esculturas del artista contemporáneo Jeff Koons que representan las diferentes fases de la Luna.
El módulo de aterrizaje “Nova-C” debía intentar tocar el suelo de la Luna el próximo 22 de febrero.
Sería el primer dispositivo estadounidense en hacerlo desde el final del programa Apolo, hace más de 50 años.