Cuando era estudiante, reprobó su primer examen de química y recordó que la experiencia casi lo “destruye”.
Este hombre de 62 años, de ascendencia tunecina y francesa, se destacó en ciencias durante toda la escuela secundaria, sin tener que sudar nunca.
Pero cuando llegó a la Universidad de Harvard como estudiante, a finales de los años 1970, le esperaba un duro despertar.
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“Estaba acostumbrado a no tener que estudiar para los exámenes”, dijo a los periodistas el miércoles, y añadió que se sentía intimidado tanto por el enorme tamaño de la sala como por la severa presencia de un supervisor.
Premio Nobel de Química obtuvo la nota más baja
“Miré la primera pregunta y no pude resolverla, y la segunda pregunta no pude resolverla”, recordó. Al final, obtuvo una puntuación de 20 sobre 100, la nota más baja de toda su clase.
“Y pensé: ‘Dios mío, este es mi fin, ¿qué estoy haciendo aquí?’”
Aunque a Bawendi le encantaba la química, se dio cuenta de que no había aprendido el arte de prepararse para los exámenes, algo que rápidamente se puso a rectificar.
“Descubrí cómo estudiar, algo que antes no sabía hacer”, dijo, y después de eso “obtuve 100 en cada examen, prácticamente”.
Su mensaje para los jóvenes es simple: “Persevera” y no dejes que los contratiempos “te destruyan”.
Premio Nobel de Química realizó un método de síntesis
“Mi primera experiencia con una F, la nota más baja de mi clase por lejos, podría haberme destruido fácilmente”, añadió.
Los puntos cuánticos son diminutos componentes nanotecnológicos que difunden la luz de los televisores y de las lámparas LED y también pueden guiar a los cirujanos cuando retiran tejidos tumorales.
Bawendi fue distinguido con el Premio Nobel de Química por haber “realizado un método de síntesis que hace que los puntos cuánticos sean muy ampliamente utilizables”.