La escotilla que da paso al espacio exterior se abrió a las 12.19 GMT y la caminata de los dos astronautas se prolongó durante 6 horas y 54 minutos.
Para Barron, que lucía en su traje espacial las cintas rojas que la distinguían como tripulante extravehicular 1, esta fue su segunda caminata, mientras que Chari hizo su primera incursión fuera del laboratorio espacial.
Los dos ingenieros de vuelo de la agencia estadounidense NASA se encargaron de ensamblar e instalar tres kits de modificación necesarios para las próximas actualizaciones de los paneles solares.
Durante su salida al espacio, los astronautas colocaron soportes y puntales para soportar la futura instalación de un Conjunto Solar Desplegable de la EEI (iROSA).
Con ello, los paneles aumentarán seis de los ocho canales de potencia de la estación, incrementando la potencia total disponible de 160 kilovatios a 215 kilovatios.
Ambos completaron las tareas más rápido de lo previsto, lo que les dejó tiempo para adelantar otros trabajos y llevar a cabo algunas labores de verificación.
Los caminantes espaciales estuvieron asistidos en la EEI por el astronauta de la NASA Tom Marshburn y el alemán de la Agencia Espacial Europea (ESA) Matthias Mauer, quienes les ayudaron en su preparación antes de la salida, fueron los encargados de monitorearles mientras realizaban los trabajos del mantenimiento y les recibieron a su regreso.
La próxima caminata espacial está prevista para el 23 de marzo, en la que dos astronautas estadounidenses, aún por determinar, instalarán mangueras en un módulo de válvula de rayos del radiador que dirige amoniaco a través de los radiadores de rechazo de calor de la estación para mantener los sistemas a la temperatura adecuada.
Los miembros de la tripulación también instalarán un cable de alimentación y datos en la plataforma científica Bartolomeo del módulo Columbus, sustituirán una cámara externa en el armazón de la estación y realizarán otras mejoras en la EEI.