Así lo han demostrado dos estudios publicados esta semana en Nature Medicine tras analizar la respuesta de los anticuerpos a la infección en personas vacunadas o que habían pasado la enfermedad.
El primero de ellos, realizado por investigadores de la Universidad de Hong Kong con 30 personas de una edad media de 48,9 años, analizó las diferencias en las respuestas de los anticuerpos a la infección original o en la variante ómicron.
El estudio incluyó personas no infectadas un mes después de la segunda dosis de la vacuna de Pfizer (31 participantes; edad media, 51,7 años) o de la vacuna CoronaVac (30 participantes; edad media, 52,1 años), y personas que recibieron tres dosis de CoronaVac (30 participantes; edad media, 50,5 años) o tres dosis de Pfizer (25 participantes; edad media, 50,6 años).
Descubrieron que dos dosis de la vacuna Pfizer o CoronaVac proporcionaban poca inmunidad de anticuerpos neutralizantes contra la infección por ómicron, incluso un mes después de la vacunación.
Sin embargo, al complementar esas dos dosis de cualquiera de las vacunas con una de refuerzo de Pfizer, esta nueva dosis proporcionó una inmunidad aceptable (definida como niveles de anticuerpos suficientes para obtener una protección superior al 50% contra el SARS-CoV-2) un mes después de su administración.
Ademas constataron que las tres dosis de Pfizer daban lugar a niveles medios de anticuerpos contra ómicron un tercio superiores a los obtenidos con dos dosis de CoronaVac más un refuerzo de Pfizer, mientras que tres dosis de CoronaVac no generaban suficiente anticuerpos neutralizantes contra la ómicron.
En un segundo artículo, Akiko Iwasaki, de la Universidad de Yale, en Connecticut (Estados Unidos), analizaron la eficacia de un plan de vacunación seguido por 101 personas (70 % mujeres con una edad media de 40,4 años) en la República Dominicana.
Estas personas recibieron dos dosis de CoronaVac seguidas, al menos cuatro semanas después, de una dosis de refuerzo con Pfizer, contra las variantes delta y ómicron.
Los participantes que recibieron esta combinación de vacunas presentaron niveles elevados de anticuerpos específicos contra el virus y fuertes respuestas de neutralización de anticuerpos contra el virus original y la variante delta, en comparación con los niveles anteriores al refuerzo de ARNm.
Aunque la neutralización de ómicron no se pudo detectar en los que habían recibido sólo dos dosis de CoronaVac, la dosis de refuerzo de Pfizer elevó 1,4 veces los niveles de anticuerpos contra ómicron.
Sin embargo, a pesar de este aumento, los niveles de anticuerpos neutralizantes contra ómicron se redujeron en general en 7,1 y 3,6 veces, en relación con los niveles de anticuerpos contra el virus original o la variante delta, respectivamente.
El estudio destaca que la infección previa por el SARS-CoV-2 no elevó significativamente los niveles de anticuerpos contra ómicron en los participantes que habían recibido el régimen de vacunas mixtas.
Los autores concluyen que estos hallazgos ponen de manifiesto la capacidad de la variante ómicron para evadir la inmunidad inducida por la vacuna o la infección, y subrayan la importancia global de las vacunas de refuerzo en los esfuerzos por combatir las variantes emergentes del SARS-CoV-2.