Las más comunes son las renales, las respiratorias complejas y las sistémicas, pero también se dan las cardiovasculares, neurológicas, hepáticas y gastrointestinales.
El análisis, con más de 70.000 pacientes ingresados, detectó altas tasas de complicaciones en todos los grupos de edad; los hombres y los mayores de 60 años fueron los más afectados, pero las dificultades aparecieron, incluso, en adultos más jóvenes y previamente sanos: el 27 % de las personas de entre 19 a 29 años y el 37 % de las de 30 a 39 años experimentaron una complicación.
Las complicaciones agudas se asocian con una capacidad reducida de autocuidados después del alta: el 13 % de los jóvenes de 19-29 años y el 17 % de los de 30-39 años se mostraron incapaces de cuidarse a sí mismos una vez fuera del hospital.
Los resultados se publican en la revista The Lancet y el trabajo incluyó a adultos hospitalizados graves: alrededor de la mitad (36.367 de los 73.197) desarrollaron una o más complicaciones de salud.
El estudio observacional hecho en 302 hospitales analizó los casos ocurridos entre el 17 de enero y el 4 de agosto de 2020, antes de que las vacunas estuvieran ampliamente disponibles y de las nuevas variantes.
Sin embargo, los autores afirman que sus hallazgos siguen siendo relevantes para contrarrestar las sugerencias de que la covid no presenta ningún riesgo para los más jóvenes, muchos de los cuales, advierten, siguen sin vacunarse.
Calum Semple, de la Universidad de Liverpool, afirma: "este trabajo contradice las ideas actuales de que la covid-19 sólo es peligrosa en personas con comorbilidades existentes y en los ancianos".
"La gravedad de la enfermedad en el momento del ingreso es un factor predictivo de las complicaciones, incluso en adultos jóvenes, por lo que la prevención de estas requiere una estrategia de intervención primaria, es decir, la vacunación".
De los 73.197 pacientes, el 56 % eran hombres, el 81 % tenían una enfermedad subyacente, el 74 % eran de raza blanca y la edad media de la cohorte era de 71 años. El 32 % de los participantes (23.092 de 73.197) murieron.
Las personas observadas entre 19-29 años fueron 1.500 y las de 30-39 años, 2.753.
En general, se produjeron complicaciones en el 50 % de todos los participantes, incluso en el 44 % de los que sobrevivieron.
Las más frecuentes fueron las renales (afectaron a casi una de cada cuatro personas), las respiratorias (una de cada cinco) y las sistémicas (una de cada seis).
Sin embargo, también se registraron complicaciones cardiovasculares en alrededor de uno de cada ocho participantes, neurológicas (menos de uno de cada veinte) y gastrointestinales o hepáticas (menos del 11 %).
En concreto, la lesión renal aguda, el probable síndrome de dificultad respiratoria aguda, la anemia y arritmia cardíaca estuvieron entre los problemas más frecuentes.
Las personas con complicaciones presentaron un peor estado de salud al ser dadas de alta y algunas, alerta la investigación, tendrán consecuencias a largo plazo.
La incidencia de complicaciones aumentó con la edad, ocurriendo en el 39 % (3.596 de 9.249) de las personas de 19 a 49 años, en comparación con el 51 % (32.771 de 63.948) de los de 50 años o más.
Thomas Drake, de la Universidad de Edimburgo, resume: "nuestra investigación analizó una amplia gama de complicaciones y descubrió que los daños a corto plazo en varios órganos son extremadamente frecuentes en las personas tratadas en el hospital por covid-19".
Estas complicaciones son comunes en todos los grupos de edad, no sólo en los mayores o en los que tienen problemas de salud preexistentes, concluye el estudio, que señala que centrarse únicamente en la muerte subestima, probablemente, el verdadero impacto de la covid-19.