Los dos pandas gigantes nacieron el sábado por la noche con una hora de intervalo, tras 147 días de gestación, y pesan 186 y 136 gramos. Sus sexo aún no fue determinado. Como los pandas “en general solo crían a un bebé tras el nacimiento de gemelos”, el zoo “decidió ayudar a Meng Meng activamente”, manteniendo a los cachorros en una incubadora varias horas al día, precisó.
“Solo existen 1.864 pandas gigantes adultos en la naturaleza y cada cría contribuye a la conservación de la especie”, recordó Knieriem. Meng Meng (“Pequeño sueño”) y el macho Jiao Qing (“Pequeño tesoro”) viven en la capital alemana desde junio de 2017. En aquel momento, los dos plantigrados fueron presentados al público por la canciller Angela Merkel y el presidente chino Xi Jinping.
Son los únicos animales de esta especie visibles actualmente en el país, y el nacimiento es una primicia para Alemania. La hembra fue inseminada artificialmente para aumentar las oportunidades de una fecundación, a pesar de que los dos animales se habían apareado.
El traslado a Berlín de estos pandas gigantes, considerados tesoros nacionales en China, había constituido un nuevo episodio de la “diplomacia de los pandas” instaurada por Pekín para mantener buenas relaciones con sus socios. Meng Meng y sus oseznos por ahora no serán visibles para el público.