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El proyecto de ley señala que todos los medios de aire, cable e internet estarán obligados a emitir estos spots o cápsulas publicitarias de 15 segundos por lo menos una vez al día entre las 7:00 y las 21:00, sin costo alguno.
Los materiales a ser emitidos en forma gratuita estarían elaborados por diferentes entidades del Estado, bajo coordinación de la Secretaría de Información y Comunicación (Sicom), entidad que gastaría multmillonarios fondos estatales para producir los spots, vídeos o mini programas publicitarios.
O sea, los canales de televisión de aire, cable, internet, radioemisoras y demás medios estarán obligados a pasar, por ley, los mamotretos que serían producidos y editados por sujetos vinculados al gobierno que, en cambio, recibirán millones por sus ideas aburridas.
De esa forma, con el cuento de proteger a las mujeres, cuidar a los niños, combatir la drogadicción, trabajar a favor de los jóvenes o dar cariño a los animales, no serán pocos quienes aparezcan como productores, creativos y avivados diversos que presentarán proyectos para solventar gastos de sus vídeos, spots y grabaciones para después obligar a los medios a publicarlas en forma gratuita.
Como se vé, con la historia de una "buena causa" está en ciernes una legislación injusta que podría aumentar la cantidad de sinvergüenzas que se alimentarían de recursos provenientes del contribuyente, bajo el padrinazgo de la Sicom, el organismo gubernamental que ahora concentra y distribuye toda la publicidad estatal.
Para ser correcto el proyecto impulsado por los citados legisladores colorados, esta normativa debería contemplar pagos justos a los medios elegidos para divulgar esos cachivaches.
¿Qué interés realmente impulsa a los senadores Velázquez, Aguinagalde y Ovelar trabajar en el trasto en cuestión?
¿Tendrá algún fin electoral o político el mencionado proyecto?
¿Tendrán los legisladores un sincero verdadero interés en proteger a los niños, las mujeres y animales?
¿La ciudadanía en general estará de acuerdo con este proyecto?
¿Los proyectistas están realmente preocupados por la drogadicción?
¿Qué hay detrás de este llamativo proyecto?