La historia, como toda disciplina científica, evoluciona, cambia e incorpora nuevos conocimientos. Lejos de pensar que la historia es siempre lo mismo, cada vez que abordamos un tema (aunque ya sea muy conocido) tenemos algo nuevo por aprender o, tal vez, un nuevo conocimiento que antes no se sabía. ¡¡¡Iniciamos este nuevo período escolar con la idea de aprender y disfrutar la historia de la que todos somos parte!!!
En general, estudiamos en las escuelas que Colón descubrió América. Sin embargo, cuando él llegó el continente estaba habitado por cientos de naciones indígenas. Una de las particularidades de nuestro continente es que fue uno de los últimos en ser poblados, porque los humanos se originaron en África y, luego, se esparcieron por el mundo. Acerquémonos hoy a los caminos que trajeron a los verdaderos descubridores del continente americano en la Prehistoria.
Los movimientos comuneros en América fueron un conjunto de acciones dirigidas por criollos y mestizos que, inspirados en otros movimientos ocurridos el siglo anterior en España, buscaban poder ejercer el derecho tradicional del común o cabildo local a fijar sus propios impuestos y a disfrutar de autonomía frente al poder central. Por lo general, los movimientos comuneros no tenían ideas separatistas en el siglo XVIII.
Una convención es un acuerdo de normas de la comunidad científica, que unifica criterios para la mejor comprensión de los temas desarrollados. En el caso de la historia, es convencional el uso de los números romanos para señalar los siglos, pero también para los nombres de los monarcas y otros temas. Esta convención no solo es usada en la historia, sino también en otras disciplinas, por ejemplo, la lengua española.
Continuamos con las convenciones y una de las más utilizadas para el estudio de la historia es la línea de tiempo, que inicia con la aparición de los homínidos y la fabricación de las primeras herramientas y llega hasta nuestros días. Hoy te proponemos una actividad que puedes realizar en grupos en la escuela o puedes hacerla solo y desafiar tu conocimiento.
Desde los primeros años de las independencias, muchos criollos americanos, entre ellos Simón Bolívar, soñaron con una América hermanada; y si bien la ilusión de una América unida en lo político no fue posible por numerosas variables, la identidad común que los pueblos americanos se profesan los une con fuertes lazos de cultura e historia.
Un continente y un sinfín de nombres que lo identifican: Iberoamérica, Hispanoamérica, América precolombina, el Caribe y Norteamérica. Cada uno de los nombres con los que reconocemos al continente americano hace referencia a su historia, su cultura y las múltiples particularidades regionales que lo distinguen. En medio de la diversidad cultural un sentimiento que nos hermana: América.
Un alemán llamado Matín Waldeseemüller elaboró un planisferio que se llamó Universalis Cosmographía en 1507, y en él aparece por primera vez la palabra América en un mapa. ¿Cuáles son las razones de este nombre? No solo se denomina así en honor al navegante Américo Vespucio, quien identificó a las nuevas tierras como un nuevo continente, sino que también a la tradición de feminizar los nombres de los continentes. ¡Así nació el nombre de nuestro continente! Veamos juntos ahora por qué celebramos su día.
El período conocido como historia colonial en Hispanoamérica abarca desde la llegada de los primeros españoles al continente (1492), hasta el inicio de los procesos de independencia que se producen entre 1810 y 1824. Durante este período la sociedad tenía características propias, conformada tanto por la herencia cultural europea, africana y de los pueblos originarios.