TRES escándalos al hilo. UNO. Paraguay se enteró por un diario estadounidense que nuestra Secretaría Antidrogas cortó la cooperación con la DEA estadounidense. Una de las agencias internacionales -junto a Uruguay, España y Europol- que impulsó el operativo A ULTRANZA que terminó con narcotraficantes y narcopolíticos presos, otros finalmente procesados como el senador y socio comercial de Horacio Cartes, Erico Galeano. Pasamos por el escarnio internacional de ser comparados con Evo Morales, el único mandatario similar a Santiago Peña cuando sacó a la DEA de Bolivia.
Nunca olvidaremos el asesinato de nuestro compañero Pablo Medina, en octubre del 2014. La mañana del velorio, ataviada de pantalón negro y camisa blanca llegó a la humilde casita del velorio su correligionaria la diputada norteña cartista Cristina Villalba. Simuló un par de lágrimas mientras abrazaba a los familiares, se paró al lado del cajón, se persignó, caminó en medio de todos nosotros y se fue.
Es muy chistoso que digan que hay persecución mediática sobre el senador cartista Gustavo Leite. Sobre todo, porque hasta ANTES de cobrar estado público SU whatsapp, enviado erróneamente por SU equivocación, confirmado por él mismo como SUS dichos -graves, discriminatorios, amenazantes- nadie estaba reparando mucho en él. Veamos si se inventó algo.
Aldo Zuccolillo, una vez nos recriminó sarcásticamente si nos había tomado por sorpresa la llegada de la Semana Santa y por eso se había producido un material que él consideraba insuficiente. Su burla era obvia: la semana santa no es una fecha que llegue súbitamente sin aviso de calendario.
Era el día más esperado del gobierno de Santiago Peña: que nos digan cuánto y en qué gastaremos NUESTRA plata, la que juntamos entre todos, la que sacamos de nuestros bolsillos para sostener el estado. El Presupuesto General de la Nación (PGN) es el primer plan financiero de Santiago Peña para el 2025.