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El sarampión, las paperas, el herpes simple, la varicela, los herpes conocidos como herpes zóster, enfermedades respiratorias, diarreas agudas, verrugas, la hepatitis, la rubéola y el SIDA, entre otras. En la fotografía, vista ampliada de virus de la gripe.
LOS VIRUS
La palabra virus deriva del latín veneno, que designa a agentes orgánicos compuestos solamente de material genético y rodeado por una envoltura protectora. El término virus se emplea para describir a los agentes causantes de enfermedades, más pequeños que las bacterias. Carecen de vida independiente, pero se pueden replicar en el interior de las células vivas, perjudicando en muchos casos a su huésped en este proceso. Los cientos de virus conocidos son causa de muchas enfermedades distintas en los seres humanos, animales, bacterias y plantas.
DESCUBRIMIENTO
En 1892, el científico ruso Demitry Ivanovsky descubrió unas partículas microscópicas infecciosas, que en 1898 fue denominado virus por el botánico holandés Martinus Beijerinck. Más tarde se descubrió virus que crecían en bacterias, a los que se denominó bacteriófagos.
El bioquímico estadounidense Wendell Meredith Stanley, en 1935, cristalizó el virus del mosaico del tabaco, demostrando que estaba compuesto del material genético llamado ácido ribonucleico (ARN) y de una envoltura proteica. El desarrollo del microscopio electrónico permitió la visualización de los virus por primera vez en la década de 1940. El perfeccionamiento de centrífugas de alta velocidad posibilitó concentrarlos y purificarlos. En 1950, el estudio de los virus animales alcanzó su culminación, con el desarrollo de los métodos del cultivo de células, soporte de la replicación viral en el laboratorio.
La mayoría de los virus que fueron descubiertos más tarde fueron analizados en las décadas de 1960 y 1970.
CARACTERÍSTICAS
Los virus son parásitos intracelulares sub-microscópicos, compuestos por ARN (ácido ribonucleico) o ADN (por ácido desoxirribonucleico), pero nunca ambos juntos, y una capa protectora de proteína y, a veces, de proteína combinada con componentes lipídicos o glúcidos.
Existen virus que tienen el material genético segmentado en dos o más partes. La cubierta externa de proteína se llama cápsida y las subunidades que la componen, capsómeros. Se denomina nucleocápsida, al conjunto de todos los elementos anteriores.
Algunos virus poseen una envoltura adicional que suelen adquirir cuando la nucleocápsida sale de la célula huésped.
La partícula viral completa se llama virión.
Los virus son parásitos intracelulares obligados: sólo se replican en células con metabolismo activo.
El tamaño y forma de los virus son muy variables. Hay dos grupos estructurales básicos: a) Isométricos: con forma de varilla, alargados, y b) Complejos: con cabeza y cola, como algunos bacteriófagos.
Los virus más pequeños son icosaédricos, polígonos de 20 lados, que miden entre 18 y 20 nanómetros de ancho (1 nanómetro es igual a la millonésima parte de 1 milímetro).
Los virus de mayor tamaño son los alargados, pero no suelen medir más de 100 nanómetros de ancho.
Los virus carecen de enzimas.
REPRODUCCIÓN
Los virus obtienen las enzimas y los precursores metabólicos necesarios para su replicación de la célula huésped que infectan. La replicación viral se inicia cuando el virus entra en la célula, las enzimas celulares eliminan la cubierta, y el ADN o ARN viral se pone en contacto con los ribosomas, dirigiendo la síntesis de proteínas. El ácido nucleico del virus se autoduplica y, una vez que se sintetizan las subunidades proteicas que constituyen la cápsida, los componentes se ensamblan dando lugar a nuevos virus.
Una única partícula viral puede originar miles de virus, los cuales se liberan destruyendo la célula infectada, y otros salen de la célula sin destruirla. En algunos casos, los virus se replican en el interior de la célula sin causar daño evidente.
Los virus que contienen ARN son sistemas replicativos únicos, porque el ARN se autoduplica sin la intervención del ADN. En algunos casos, el ARN viral funciona como ARN mensajero, y se replica de forma indirecta utilizando el sistema ribosomal y los precursores metabólicos de la célula huésped. En otros, los virus llevan en la cubierta una enzima dependiente de ARN que dirige el proceso de síntesis. Los retrovirus, otros virus del ARN, pueden producir una enzima que sintetiza ADN a partir de ARN. El ADN formado actúa entonces como material genético viral.
ENFERMEDADES CAUSADAS POR VIRUS
La rabia: El virus de la rabia se transmite a los seres humanos por la mordedura de un perro infectado, generalmente. Pero en una zona donde la rabia está presente, la picadura de cualquier animal puede ser sospechosa. Los síntomas de esta enfermedad aparecen después de un periodo de incubación de diez días; algunos son: fiebre, dificultades respiratorias, espasmos musculares y miedo irracional al agua. La muerte es casi inevitable, y llega entre los tres días y las tres semanas después de la aparición de los síntomas. El mejor tratamiento es la prevención mediante la vacunación del animal.
Las fiebres hemorrágicas: Son enfermedades víricas agudas que suelen comenzar con un cuadro de fiebre y dolores musculares que evolucionan hacia aturdimiento, colapso, hinchazón y choque. Según el tipo de virus, las fiebres hemorrágicas producen afecciones respiratorias, hemorragias internas, patologías renales y la muerte. Hay más de veinte virus de distintas familias que causan fiebres hemorrágicas: Arenaviridae (arenavirus), Bunyaviridae (bunyavirus), Flaviviridae (flavivirus) y Filoviridae (filovirus). Los virus reciben el nombre de la región donde se identificaron por primera vez.
La poliomielitis: Es una enfermedad infecciosa viral del sistema nervioso central. En muchos casos provoca una parálisis, como secuela de la enfermedad. Entre los 5 y los 10 años se presenta con mayor frecuencia, denominándose en este caso parálisis infantil. Penetran en el organismo por vía digestiva y se extiende por los tractos nerviosos afectando a varias partes del sistema nervioso central. El periodo de incubación oscila entre 4 y 35 días. Los primeros síntomas son: cefaleas, fiebre, vómitos, estreñimiento, rigidez cervical y dolor en las extremidades. Sólo uno de cada cien casos de infección aguda de poliomielitis acaba en parálisis.
La fiebre amarilla: Es una enfermedad infecciosa, no contagiosa, causada por un virus. El periodo de incubación es de seis días. En los casos graves, el inicio es súbito, con síntomas típicos como cefalea, dolor de espalda y fiebre. La primera fase se caracteriza por náuseas, vómitos y la presencia de albúmina en la orina. Después de la fiebre inicial, la temperatura se normaliza, pero entre el cuarto y quinto día vuelve a subir. Esta segunda fase está marcada por la ictericia, hemorragias en las membranas mucosas, vómitos de sangre y degeneración grasa del hígado, riñones y corazón. La destrucción de las células hepáticas produce acumulación de pigmentos biliares en la piel, lo que da nombre a la enfermedad. La muerte suele ocurrir entre el cuarto y octavo día desde el inicio.
La viruela: Causa cicatrices indelebles y, a veces, la muerte. Pero se erradicó por completo en 1979 con el programa internacional de vacunación. Actualmente, solo dos laboratorios en todo el mundo mantienen reservas del virus, con fines de investigación y para preparar nuevas vacunas si la enfermedad reaparece.
Otras enfermedades: La gripe, el resfriado común, el sarampión, las paperas, herpes simple, la varicela, los herpes conocidos como herpes zóster, enfermedades respiratorias, diarreas agudas, verrugas, la hepatitis y la rubéola.
El síndrome de inmunodeficiencia adquirida, SIDA, es un tema amplio, por lo que le dedicaremos un estudio aparte en la siguiente entrega de Ciencias Básicas.
LOS VIRUS
La palabra virus deriva del latín veneno, que designa a agentes orgánicos compuestos solamente de material genético y rodeado por una envoltura protectora. El término virus se emplea para describir a los agentes causantes de enfermedades, más pequeños que las bacterias. Carecen de vida independiente, pero se pueden replicar en el interior de las células vivas, perjudicando en muchos casos a su huésped en este proceso. Los cientos de virus conocidos son causa de muchas enfermedades distintas en los seres humanos, animales, bacterias y plantas.
DESCUBRIMIENTO
En 1892, el científico ruso Demitry Ivanovsky descubrió unas partículas microscópicas infecciosas, que en 1898 fue denominado virus por el botánico holandés Martinus Beijerinck. Más tarde se descubrió virus que crecían en bacterias, a los que se denominó bacteriófagos.
El bioquímico estadounidense Wendell Meredith Stanley, en 1935, cristalizó el virus del mosaico del tabaco, demostrando que estaba compuesto del material genético llamado ácido ribonucleico (ARN) y de una envoltura proteica. El desarrollo del microscopio electrónico permitió la visualización de los virus por primera vez en la década de 1940. El perfeccionamiento de centrífugas de alta velocidad posibilitó concentrarlos y purificarlos. En 1950, el estudio de los virus animales alcanzó su culminación, con el desarrollo de los métodos del cultivo de células, soporte de la replicación viral en el laboratorio.
La mayoría de los virus que fueron descubiertos más tarde fueron analizados en las décadas de 1960 y 1970.
CARACTERÍSTICAS
Los virus son parásitos intracelulares sub-microscópicos, compuestos por ARN (ácido ribonucleico) o ADN (por ácido desoxirribonucleico), pero nunca ambos juntos, y una capa protectora de proteína y, a veces, de proteína combinada con componentes lipídicos o glúcidos.
Existen virus que tienen el material genético segmentado en dos o más partes. La cubierta externa de proteína se llama cápsida y las subunidades que la componen, capsómeros. Se denomina nucleocápsida, al conjunto de todos los elementos anteriores.
Algunos virus poseen una envoltura adicional que suelen adquirir cuando la nucleocápsida sale de la célula huésped.
La partícula viral completa se llama virión.
Los virus son parásitos intracelulares obligados: sólo se replican en células con metabolismo activo.
El tamaño y forma de los virus son muy variables. Hay dos grupos estructurales básicos: a) Isométricos: con forma de varilla, alargados, y b) Complejos: con cabeza y cola, como algunos bacteriófagos.
Los virus más pequeños son icosaédricos, polígonos de 20 lados, que miden entre 18 y 20 nanómetros de ancho (1 nanómetro es igual a la millonésima parte de 1 milímetro).
Los virus de mayor tamaño son los alargados, pero no suelen medir más de 100 nanómetros de ancho.
Los virus carecen de enzimas.
REPRODUCCIÓN
Los virus obtienen las enzimas y los precursores metabólicos necesarios para su replicación de la célula huésped que infectan. La replicación viral se inicia cuando el virus entra en la célula, las enzimas celulares eliminan la cubierta, y el ADN o ARN viral se pone en contacto con los ribosomas, dirigiendo la síntesis de proteínas. El ácido nucleico del virus se autoduplica y, una vez que se sintetizan las subunidades proteicas que constituyen la cápsida, los componentes se ensamblan dando lugar a nuevos virus.
Una única partícula viral puede originar miles de virus, los cuales se liberan destruyendo la célula infectada, y otros salen de la célula sin destruirla. En algunos casos, los virus se replican en el interior de la célula sin causar daño evidente.
Los virus que contienen ARN son sistemas replicativos únicos, porque el ARN se autoduplica sin la intervención del ADN. En algunos casos, el ARN viral funciona como ARN mensajero, y se replica de forma indirecta utilizando el sistema ribosomal y los precursores metabólicos de la célula huésped. En otros, los virus llevan en la cubierta una enzima dependiente de ARN que dirige el proceso de síntesis. Los retrovirus, otros virus del ARN, pueden producir una enzima que sintetiza ADN a partir de ARN. El ADN formado actúa entonces como material genético viral.
ENFERMEDADES CAUSADAS POR VIRUS
La rabia: El virus de la rabia se transmite a los seres humanos por la mordedura de un perro infectado, generalmente. Pero en una zona donde la rabia está presente, la picadura de cualquier animal puede ser sospechosa. Los síntomas de esta enfermedad aparecen después de un periodo de incubación de diez días; algunos son: fiebre, dificultades respiratorias, espasmos musculares y miedo irracional al agua. La muerte es casi inevitable, y llega entre los tres días y las tres semanas después de la aparición de los síntomas. El mejor tratamiento es la prevención mediante la vacunación del animal.
Las fiebres hemorrágicas: Son enfermedades víricas agudas que suelen comenzar con un cuadro de fiebre y dolores musculares que evolucionan hacia aturdimiento, colapso, hinchazón y choque. Según el tipo de virus, las fiebres hemorrágicas producen afecciones respiratorias, hemorragias internas, patologías renales y la muerte. Hay más de veinte virus de distintas familias que causan fiebres hemorrágicas: Arenaviridae (arenavirus), Bunyaviridae (bunyavirus), Flaviviridae (flavivirus) y Filoviridae (filovirus). Los virus reciben el nombre de la región donde se identificaron por primera vez.
La poliomielitis: Es una enfermedad infecciosa viral del sistema nervioso central. En muchos casos provoca una parálisis, como secuela de la enfermedad. Entre los 5 y los 10 años se presenta con mayor frecuencia, denominándose en este caso parálisis infantil. Penetran en el organismo por vía digestiva y se extiende por los tractos nerviosos afectando a varias partes del sistema nervioso central. El periodo de incubación oscila entre 4 y 35 días. Los primeros síntomas son: cefaleas, fiebre, vómitos, estreñimiento, rigidez cervical y dolor en las extremidades. Sólo uno de cada cien casos de infección aguda de poliomielitis acaba en parálisis.
La fiebre amarilla: Es una enfermedad infecciosa, no contagiosa, causada por un virus. El periodo de incubación es de seis días. En los casos graves, el inicio es súbito, con síntomas típicos como cefalea, dolor de espalda y fiebre. La primera fase se caracteriza por náuseas, vómitos y la presencia de albúmina en la orina. Después de la fiebre inicial, la temperatura se normaliza, pero entre el cuarto y quinto día vuelve a subir. Esta segunda fase está marcada por la ictericia, hemorragias en las membranas mucosas, vómitos de sangre y degeneración grasa del hígado, riñones y corazón. La destrucción de las células hepáticas produce acumulación de pigmentos biliares en la piel, lo que da nombre a la enfermedad. La muerte suele ocurrir entre el cuarto y octavo día desde el inicio.
La viruela: Causa cicatrices indelebles y, a veces, la muerte. Pero se erradicó por completo en 1979 con el programa internacional de vacunación. Actualmente, solo dos laboratorios en todo el mundo mantienen reservas del virus, con fines de investigación y para preparar nuevas vacunas si la enfermedad reaparece.
Otras enfermedades: La gripe, el resfriado común, el sarampión, las paperas, herpes simple, la varicela, los herpes conocidos como herpes zóster, enfermedades respiratorias, diarreas agudas, verrugas, la hepatitis y la rubéola.
El síndrome de inmunodeficiencia adquirida, SIDA, es un tema amplio, por lo que le dedicaremos un estudio aparte en la siguiente entrega de Ciencias Básicas.