TALLER DE CARPINTERÍA (Final).

Carlos Riquelme

Un profesional carpintero no sólo implica el "saber hacer", sino también "ser". La combinación de ambos nos lleva a la obtención de productos de calidad y tecnología, como fruto de conocimientos y prácticas en el ramo. Además, el ser profesional hace referencia a un "modo de ser ético", ideal que la sociedad demanda hoy día. La experiencia profesional de Carlos Vera como un excelente carpintero nos lleva a recrear de nuevo los valores que van perdiendo vigencia, tales como interés por aprender, perseverancia, calidad de trabajo, óptimo rendimiento, honestidad, entre otros.       

La presente entrega constituye el último artículo que hace referencia al Taller de Carpintería y, precisamente, lo dedicamos a una entrevista realizada a Carlos Vera, de la localidad de Capiatá, quien estudió la especialidad de Carpintería en la Escuela Vocacional Carlos Antonio López. Carlos, de 32 años, nos cuenta cómo incursionó en la profesión, que hoy día es su medio de vida.

Con el peso de un buen profesional —sabiendo lo que dice y hace— en el ramo de la carpintería, nuestro entrevistado comenta que no fue nada fácil llegar a consolidar la profesión en el arte de trabajar la madera. Siendo de familia de pocos recursos, a pesar de ello terminó el bachillerato, logro que en esos momentos no le ubicaba en posición de conseguir un trabajo seguro. Esta realidad lo llevó a realizar labores de todo tipo, desde ser ayudante albañil hasta pasar a recolectar plásticos, con tiempos prolongados de desocupación.

Una de las profesiones que le hubiera gustado ejercer —tal vez por vocación— por aquel tiempo era la carpintería; a este fin fue a la carpintería del barrio, cuyo propietario era don José; este fue quien le insinuó que estudiara la especialidad de Carpintería; además, le ofreció la posibilidad de trabajar como aprendiz. Así lo hizo: sin dudar, realizó las averiguaciones para estudiar Carpintería. Dos años más tarde, Carlos era un egresado de la Vocacional; por entonces, se podía decir que era todo un profesional, teniendo en cuenta que a la par que estudiaba, realizaba prácticas de todo tipo de trabajo en el taller de don José.

Don José no sólo le ayudó a estudiar y realizar los trabajos en su carpintería, sino además le proveyó de sus primeras herramientas y algunas maquinarias para que Carlos tuviera su propio taller de carpintería. Hace 5 años, el profesional —hoy, don Carlos— tiene la carpintería de su propiedad, está casado —don José y su esposa fueron sus padrinos de bodas—, y tiene dos hijos.

Orgulloso y aplomado en su profesión, don Carlos comenta que la carpintería, hoy día, es su medio de sustento familiar; con la honestidad que debe caracterizar a todo profesional, está dando un servicio de calidad a la comunidad; "el secreto —nos dice— es no mentir al cliente, proveyéndole un buen trabajo con buenos materiales, fuertes y duraderos".

Así como empezó Carlos la profesión de carpintería, observamos en su taller a dos jóvenes trabajando, de quienes nos dijo que se trataba de aprendices de la profesión y, al respecto, agregó que convenía repetir la historia, es decir, puntualizó: "Estos jóvenes deben tener la misma oportunidad que tuve yo para llegar a ser un buen profesional".         
Apuntes tecnológicos.
Ser un buen profesional y lograr productos con excelencia, ciertamente no se consigue de la noche a la mañana: implica la constancia en incorporar conocimientos tecnológicos (teoría), acompañada de intensas prácticas a fin de llegar al producto deseado: saber hacer.

Caja de herramienta

La experiencia de don Carlos es bastante ilustrativa. Todo se da en proceso: estudiar, ser un aprendiz, adquirir técnicas, afianzarse en los trabajos sencillos, y luego en los más complicados; tener la seguridad de un profesional, encaminarse hacia la microempresa, consolidarse como un profesional de excelencia, lanzarse como microempresario y, finalmente. ser próspero. A todo esto hay que unir las coordenadas éticas: responsabilidad y honestidad.
Enlance copiado

Lo
más leído
del día

01
02
03
04
05

Te puede interesar

Comentarios

Las opiniones y puntos de vista expresados en los comentarios son responsabilidad exclusiva de quienes los emiten y no deberán atribuirse a ABC, ya que no son de autoría ni responsabilidad de ABC ni de su Dirección ni de Editorial Azeta S.A.