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Traigo a colación que también me preguntaron cuál es el perfil del maestro paraguayo y así transcurrió casi una hora, hasta que alguien preguntó: "¿Qué se necesita para ser un legislador (diputado o senador)?".Lancé la pregunta al curso y salieron, más o menos, las siguientes respuestas:
- Ser dirigente de algún partido o movimiento político.
- Ser dirigente campesino o gremialista.
- Prometer cosas, aunque no se esté convencido de poder cumplirlas.
- Si no puedes ocupar una banca por el partido al cual perteneces, crear un movimiento y colocar tu nombre en el primer lugar.
La lista sigue, pero en fin, creí conveniente cortar y tratar de analizar para sacar conclusiones provechosas para el grupo.
Comparto algunos puntos que recuerdo que trazaron para reflexionar y enriquecer en el curso en horas de Ética u Orientación.
Perfil de un legislador
- Ser una persona honesta y trabajadora.
- Conocer la idiosincrasia de su pueblo.
- Apreciar el "ser" no el "tener".
- Tener una cultura general.
- Ser puntual en las reuniones.
- Presentar proyectos viables (no perderse en cosas sin importancia).
- Que se le conozca por su trabajo, no por ser un haragán, o un charlatán, o por dormir durante las sesiones, o por ser un glotón que solo se pasa comiendo y criando panza.
- Que no sea un vicioso, porque los jóvenes aprendemos no lo que nos dicen, sino lo que vemos.
- Que utilicen debidamente el dinero del pueblo, o sea, el aporte de nuestros padres al Estado.
Al final, concluyeron con el siguiente compromiso:
"Nosotros, como jóvenes, prometemos alguna vez cuando seamos legisladores no descuidar a la gente que creyó en nosotros, no malgastar el dinero del Estado en jugosos sueldos y viáticos, en vehículos costosos con combustible y hasta choferes a nuestra disposición; que el uso de Internet sea para buscar informaciones para elaborar proyectos o, por lo menos, para enriquecer nuestro vocabulario y no para ver páginas obscenas, que muy poco habla de la delicadeza y dedicación de alguien que dice ser representante del pueblo.
"Creemos que en vez de pagar a tantos diputados y senadores debería equiparse mejor nuestros colegios, crear espacios donde desarrollar nuestros proyectos comunitarios con los niños de la calle, con los indígenas y otros, porque si bien muchos de nosotros somos objetores de conciencia, solo porque no vemos como algo útil ir al cuartel estamos dispuestos a ayudar como la ley manda en trabajos comunitarios para que nuestro país sea el Paraguay que queremos y que necesitamos para ser felices".
- Ser dirigente de algún partido o movimiento político.
- Ser dirigente campesino o gremialista.
- Prometer cosas, aunque no se esté convencido de poder cumplirlas.
- Si no puedes ocupar una banca por el partido al cual perteneces, crear un movimiento y colocar tu nombre en el primer lugar.
La lista sigue, pero en fin, creí conveniente cortar y tratar de analizar para sacar conclusiones provechosas para el grupo.
Comparto algunos puntos que recuerdo que trazaron para reflexionar y enriquecer en el curso en horas de Ética u Orientación.
Perfil de un legislador
- Ser una persona honesta y trabajadora.
- Conocer la idiosincrasia de su pueblo.
- Apreciar el "ser" no el "tener".
- Tener una cultura general.
- Ser puntual en las reuniones.
- Presentar proyectos viables (no perderse en cosas sin importancia).
- Que se le conozca por su trabajo, no por ser un haragán, o un charlatán, o por dormir durante las sesiones, o por ser un glotón que solo se pasa comiendo y criando panza.
- Que no sea un vicioso, porque los jóvenes aprendemos no lo que nos dicen, sino lo que vemos.
- Que utilicen debidamente el dinero del pueblo, o sea, el aporte de nuestros padres al Estado.
Al final, concluyeron con el siguiente compromiso:
"Nosotros, como jóvenes, prometemos alguna vez cuando seamos legisladores no descuidar a la gente que creyó en nosotros, no malgastar el dinero del Estado en jugosos sueldos y viáticos, en vehículos costosos con combustible y hasta choferes a nuestra disposición; que el uso de Internet sea para buscar informaciones para elaborar proyectos o, por lo menos, para enriquecer nuestro vocabulario y no para ver páginas obscenas, que muy poco habla de la delicadeza y dedicación de alguien que dice ser representante del pueblo.
"Creemos que en vez de pagar a tantos diputados y senadores debería equiparse mejor nuestros colegios, crear espacios donde desarrollar nuestros proyectos comunitarios con los niños de la calle, con los indígenas y otros, porque si bien muchos de nosotros somos objetores de conciencia, solo porque no vemos como algo útil ir al cuartel estamos dispuestos a ayudar como la ley manda en trabajos comunitarios para que nuestro país sea el Paraguay que queremos y que necesitamos para ser felices".