Este prolífico creador, con más de 20.000 trabajos, nació en Málaga, España, el 25 de octubre de 1881; hijo de María Picasso López y del profesor de arte José Ruiz Blasco. Hasta 1898, siempre utilizó los apellidos paterno y materno para firmar sus obras, pero alrededor de 1901 abandonó el primero para utilizar desde entonces sólo el apellido de la madre.

Su genialidad se manifiesta desde fechas muy tempranas. A la edad de 10 años hizo sus primeras pinturas, y a los 15 aprobó airoso los exámenes de ingreso en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona, con su gran lienzo “Ciencia y caridad”, que representa dentro aún de la corriente academicista a un médico, una monja y un niño junto a la cama de una mujer enferma. Ganó una medalla de oro.

PERÍODOS Y ESTILOS

PERÍODO AZUL
Se llama período azul por el predominio de los tonos azules en las obras que realizó durante los años 1902 a 1904. En ellas refleja la miseria humana, con trabajadores extenuados, mendigos, alcohólicos y prostitutas, representados con cuerpos y formas ligeramente alargadas.

En 1904, Picasso se establece en París. El ambiente bohemio de las calles parisinas le fascinó desde un primer momento, y le sirvió de fuente de inspiración.

La asimilación del postimpresionismo y del simbolismo se reflejan en sus cuadros, que muestran a la gente en los salones de baile y en los cafés.

El postimpresionismo es un estilo pictórico que se caracteriza por el uso expresivo del color, la mayor libertad formal y la reacción contra el deseo de reflejar fielmente la naturaleza. Los artistas postimpresionistas presentaron una visión más subjetiva del mundo.

El simbolismo de las obras de Picasso se ve en los colores vivos y líneas vigorosas para representar visiones cargadas de emoción.

Influyeron en la creación de Picasso, los temas de la obra de Edgar Degas y Henri Marie Raymond de Toulouse-Lautrec y el estilo de Paul Gauguin. El cuadro “Habitación azul”, es un modelo de este período.

PERÍODO ROSA

En París, Picasso conoce a Fernande Olivier y entabla con ella una relación amorosa muy intensa e idealizada. Esta feliz correspondencia amorosa cambió el estilo de Picasso, en cierto sentido. El gusto por el color azul mudó hacia tonos rosas y rojos.

Por tal motivo, los años 1904 y 1905 se conocen como período rosa. En este tiempo, sus temas se centraron en el mundo del circo, que visitó con gran asiduidad, y se inspiró en ellos para crear obras como “Familia de acróbatas”.

PROTOCUBISMO

Durante la permanencia en Gosol, en el verano de 1906, Picasso entra en una nueva fase marcada por la influencia del arte griego, ibérico y africano. La obra clave de este período es “Las señoritas de Avignon”, con un estilo peculiar: la superficie del cuadro semeja un cristal fracturado. Picasso rompe así con la profundidad espacial y la forma de representación ideal del desnudo femenino, reestructurándolo por medio de líneas y planos cortantes y angulosos. Esta obra no fue entendida incluso por los críticos y pintores vanguardistas de aquel momento.

Otras obras de ese estilo son “Andorra” y el célebre retrato de “Gertrude Stein”, que revela un tratamiento del rostro en forma de máscara.

Tres músicos (Arlequín con un traje a rombos). Algunos expertos creen que Arlequín es un autorretrato del Picasso.

CUBISMO ANALÍTICO Y SINTÉTICO

Picasso pintó en 1908, una serie de paisajes dentro de un estilo que un crítico describió después como si hubieran sido hechos a base de “pequeños cubos”, imponiéndose así el término cubismo. Junto con Georges Braquee, entre 1908 y 1911, trabajaron en estrecha colaboración dentro de esta línea de descomposición y análisis de las formas, desarrollando juntos la primera fase del cubismo, conocida como cubismo analítico.

Los temas favoritos de Picasso fueron los instrumentos musicales, las naturalezas muertas y sus amigos. Su obra destacada de este estilo fue “Daniel Henry Kahnweiler”.

En 1912, realiza su primer collage “Naturaleza muerta con silla de paja”, combinando pasta de papel y un trozo de hule sobre un lienzo pintado sólo en algunas zonas, que representa un vaso, un periódico, una pipa, una ostra y un limón. Esta técnica señala la transición hacia el cubismo sintético, que se caracteriza por ser más decorativa, y el color desempeña un papel más destacado.

ESCULTURA CUBISTA

“El busto de bronce de Fernande Olivier” es una muestra de la habilidad técnica de Picasso, en el tratamiento de las formas tridimensionales. Realizó además conjuntos formados por fragmentos de madera, metal, papel y otros materiales, explorando con ello las hipótesis espaciales planteadas por la pintura cubista.

Su “Vaso de ajenjo” es una escultura en bronce, coloreada, que representa un vaso de ajenjo sobre el que aparece colocada una cucharilla de plata y la reproducción exacta de un terrón de azúcar; tal vez se trate del ejemplo más interesante de escultura policromada cubista realizada por Picasso.