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El colegio Cristo Rey es uno de los colegios más emblemáticos de Asunción por su aporte a la educación nacional y por su lucha contra la represión que ejercía la dictadura de Alfredo Stroessner.
La primera parte de la historia de la orden jesuita, fundada por San Ignacio de Loyola, comenzó en el año 1609 en la Provincia Gigante del Paraguay y concluyó en 1767 con la expulsión decretada por Carlos III.
La segunda etapa comienza en 1927 con el retorno de la orden tras las intensas gestiones realizadas por monseñor Juan Sinforiano Bogarín para su regreso.
Hasta 1950 los jesuitas en Paraguay constituían prácticamente como una misión dependiente de la Provincia de Argentina. En 1951 queda constituida, juntamente con Bolivia, una viceprovincia dependiente de la Provincia española denominada Tarraconense.
En 1952 el colegio Cristo Rey abre sus aulas de secundaria en Asunción con clases nocturnas para obreros y una escuela de radiotécnica. Desde entonces ha tenido una trascendental importancia en la formación de los jóvenes en valores de solidaridad y patriotismo.
A partir de 1958, gracias al desarrollo de la Compañía de Jesús en Paraguay, los jesuitas dejan su dependencia de los jesuitas bolivianos para construir por sí solos una viceprovincia dependiente de la Provincia española de Andalucía con una labor cada vez más fructífera para el país.
La primera parte de la historia de la orden jesuita, fundada por San Ignacio de Loyola, comenzó en el año 1609 en la Provincia Gigante del Paraguay y concluyó en 1767 con la expulsión decretada por Carlos III.
La segunda etapa comienza en 1927 con el retorno de la orden tras las intensas gestiones realizadas por monseñor Juan Sinforiano Bogarín para su regreso.
Hasta 1950 los jesuitas en Paraguay constituían prácticamente como una misión dependiente de la Provincia de Argentina. En 1951 queda constituida, juntamente con Bolivia, una viceprovincia dependiente de la Provincia española denominada Tarraconense.
En 1952 el colegio Cristo Rey abre sus aulas de secundaria en Asunción con clases nocturnas para obreros y una escuela de radiotécnica. Desde entonces ha tenido una trascendental importancia en la formación de los jóvenes en valores de solidaridad y patriotismo.
A partir de 1958, gracias al desarrollo de la Compañía de Jesús en Paraguay, los jesuitas dejan su dependencia de los jesuitas bolivianos para construir por sí solos una viceprovincia dependiente de la Provincia española de Andalucía con una labor cada vez más fructífera para el país.