LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA

El verso

Capacidad: Identifica las características y los elementos de los textos en verso.


Todo texto literario presenta una serie de desviaciones con respecto al lenguaje cotidiano, pero en el caso de los textos literarios en verso, estas desviaciones aumentan de manera considerable, ya que el verso mismo supone una ruptura con respecto a los usos lingüísticos habituales. Veamos por qué.



Características
▪ Es la unidad mínima de análisis en un poema.
▪ Puede estar formado por una palabra o varias.

▪ Siempre tiene un ritmo, que se consigue mediante una combinación de sílabas tónicas o átonas que asegure una regularidad acentual.
▪ Por lo general, un verso se escribe en una línea.
▪ Presenta una forma indisociable de su contenido; sus signos constituyentes aparecen tan fuertemente trabados que no pueden ser sustituidos por sinónimos. Es lo que llamamos cohesión poética.
▪ Está destinado a ser repetido como fue concebido, no de otra manera.

▪ El verso puede aparecer en textos épicos, líricos y dramáticos.


La función del verso

El verso cumple, fundamentalmente, una función subjetiva. En los textos líricos, el autor desahoga sus sentimientos personales y aparece de forma bien visible la función poética de la lengua: el uso de la primera persona gramatical, las exclamaciones, la particular expresividad de algunas construcciones sintácticas como el hipérbaton, etc.

Elementos
1. El ritmo: Es la sucesión de varios sonidos semejantes que se dividen en dos o tres grupos de sílabas dentro de cada verso, de forma que en cada grupo hay un sonido que se destaca entre todos.

Las sílabas que destacan son las que llevan el acento rítmico.


2. El acento: Es el agente de ritmo más característico de la métrica castellana. El acento rítmico es el que une los diversos vocablos de una frase entre sí. El acento prosódico de una palabra es la mayor elevación o intensidad de voz, que recae sobre una de sus sílabas. El acento ortográfico es la tilde que se coloca en determinada sílaba de palabras fundamentalmente agudas o esdrújulas.
3. La rima: Es la semejanza o igualdad en la terminación de las palabras finales de los versos desde la vocal acentuada.

4. Las pausas o ritmo de tono: La altura musical que alcanza la voz, con arreglo a su número de vibraciones por segundo es la propiedad que llamamos tono. Las sucesivas variaciones de tono originan la línea melódica de la cadena hablada, la entonación fuente de numerosos efectos expresivos. Cada una de las interrupciones de la entonación es una pausa. En métrica se distinguen varios tipos de pausa: la estrófica, la versal, la interna y la llamada cesura.

a) La pausa estrófica: Se produce al final de cada estrofa y se representa con tres rayas inclinadas (///).

b) La pausa versal: Se guarda al final de cada verso; por durar menos que la estrófica se representa con sólo dos líneas oblicuas (//).
c) La pausa interna: Puede producirse en el interior del verso como consecuencia de un signo de puntuación. No impide la formación de sinalefa y se representa gráficamente con una raya oblicua (/).

d) La cesura: Es una pausa interna especial; aparece sólo en los versos largos, de doce sílabas o más, los divide en dos mitades (hemistiquios) y se simboliza con dos barras (//).

La medida de los versos
El ritmo do un conjunto de versos obtenidos por la repetición de la cantidad del número de sílabas. El número silábico permite la clasificación del verso en bisílabos, trisílabos, tetrasílabos... Los versos de ocho o menos sílabas se clasifican como de arte menor, mientras que los de nueve o más pertenecen al arte mayor.
Al medir un verso hay que tener en cuenta una serie de fenómenos que implican en la práctica una variación del número de sílabas métricas con relación al número de sílabas fonológicas. Estos fenómenos métricos son:
a) La sinalefa: Se produce al unir en una sola sílaba métrica la vocal final de una palabra y la inicial de la siguiente. La sinalefa es una licencia, un recurso al que puede recurrir el poeta si lo considera necesario. Cada vez que no se constituya sinalefa entre las dos vocales, final e inicial, de dos palabras contiguas tenemos un hiato.

Ejemplo: “Sevilla tiene un camino” (Sinalefa)
“¡Cómo es bella y hermosa!” (Hiato)
b) La sinéresis: Se produce al pronunciar en una sola sílaba métrica dos vocales que no forman diptongo.

Ejemplo: “Harían con tu corazón”. La primera palabra tiene tres sílabas fonológicas, sin embargo, por efecto de la sinéresis debe leerse en dos golpes de voz.

c) La diéresis: Consiste en leer las vocales que forman un diptongo como si fueran dos sílabas distintas.

Ejemplo: “Si entre aquellas ruinas y despojo”.

e) La acentuación de la última palabra del verso: Incide en el número de sílabas métricas. Al verso que termina en palabra aguda se añade una sílaba más; al que termina en esdrújula se le descuenta la sílaba siguiente a la que lleva el acento. En el caso de que la última palabra sea llana, se mantiene el número de sílabas.

Ejemplos:
“Cantan las aves 6
Con el buen pastor” 5 + 1 = 6 (Palabra final aguda)

“Más que como una música 8 – 1 = 7 (Palabra final esdrújula)
Como otra imagen tuya” 7
Fuentes:
- FUENTES, J. L. Comunicación (Estudio del Lenguaje), Ed. Bibliográfica Internacional, Sao Pablo, págs. 440 – 447.

- Larousse, Manual Práctico (Análisis y comentario de textos), Barcelona, 1994.
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