LA VEJEZ

En la ancianidad, es inevitable que las energías físicas no sean las de siempre, pero a pesar de ello, esta etapa de la vida no tiene por qué "ser vivida sin entusiasmo". Se posee una gran ventaja sobre las demás: "la experiencia".

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En esta etapa se sabe, mejor, que vale la pena. La ancianidad puede ser el momento más creativo de la vida, cuando, se puede volver serenamente sobre uno mismo, descubrir quién se ha sido realmente y dedicarse a satisfacer los auténticos deseos. Como ejemplos se tienen muchas obras literarias perdurables de la historia; las escribieron autores de la tercera edad.CARACTERÍSTICAS BIOLÓGICAS
Ya desde la adultez se producen deterioros que en esta etapa se acentúan; ellos son:
Pérdida de elasticidad muscular, decrece la capacidad de percepción que afectan sobre todo a la visión, la audición, disminución de tiempos de reacción.
CONSECUENCIA DEL PROCESO DE ENVEJECIMIENTO PRIMARIO Y SECUNDARIO
- Envejecimiento primario
Como el resto del cuerpo, el cerebro también envejece. Se llama envejecimiento primario al deterioro que se relaciona con la presencia de enfermedades, y que son nocivas para el cerebro, por ejemplo: la arteriosclerosis.
Las enfermedades son consecuencia del envejecimiento que se produce en todas las personas y están  determinadas  genéticamente.
- Envejecimiento secundario
Son cambios que están ligados a estilos y condiciones de vida, hábitos de alimentación, ejercicios.
Se puede afirmar que, en general, cada cual tiene la vejez que se ha ganado y que los buenos hábitos de vida, higiene, alimentación, ejercicio, sueño, durante  la juventud y la adultez, rinden buenos dividendos en la vejez.
Las diferencias individuales en el ritmo, la forma y la edad del envejecimiento  son muy importantes.
Tanto en lo que se refiere al envejecimiento primario como al secundario, las diferencias que existieron entre unas personas y otras a lo largo de todo el proceso de crecimiento no sólo se mantienen, sino que incluso aumentan.
La jubilación
Suele darse, en general, al terminar la adultez o iniciarse la vejez, la jubilación suele ser, a menudo, una fuente de conflictos, especialmente, si las personas, después de jubilarse, no cuentan con una actividad productiva a que dedicarse.
Algunas personas se sienten física e intelectualmente muy bien como para dejar el trabajo.
Otras, desean jubilarse, pero después de un tiempo añoran volver a trabajar.
Lee la siguiente historia y luego escribe tu comentario:
Hace muchos años, en un instituto de cirugía, recibieron un llamado para atender una emergencia en una casa cercana al hospital. Los médicos subieron con el equipo de resucitación necesario a la ambulancia, y cuando llegaron, se encontraron con una humilde casa del barrio.
Entraron al cuarto de la enferma, una mujer de unos 70 años con paro cardíaco. Lamentablemente no pudieron hacer nada: a pesar de todos los intentos, el hecho era irreversible.
Con dolor le contaron a la hermana de la paciente —que estaba en el cuarto— que no había nada más que hacer y que se llevarían el cuerpo al hospital para los certificados y trámites. Ella le dijo a un señor, que —según se enteraron los médicos después—era el marido de la mujer fallecida: "María murió". El hombre palideció. Se dejó caer en una pequeña silla de mimbre y dijo: "Me quiero morir".
Esas fueron sus últimas palabras. Nada pudieron hacer los seis profesionales presentes. El hombre dijo: "Me quiero morir" y se derrumbó.
Dadas las condiciones de la muerte, se hizo una autopsia de su cuerpo que arrojó un resultado que todos preveían: Estallido cardíaco.
El camino de las lágrimas, de J. Bucay
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