El cuerpo mismo contiene materias que, gracias a sus propiedades, nos aseguran inclusive nuestra supervivencia. En la antigüedad, se definía materia como todo lo que posee peso, ocupa un lugar en el espacio, y es capaz de impresionar los sentidos. Hoy sabemos que muchas otras características definen lo que es materia.

Si tienes un vaso lleno de jugo, a que no te animas a ponerle cubitos de hielo... perderías parte de tu rico jugo. El hielo (sólido) desplaza parte del líquido y la empuja hacia arriba; esto es debido a que el agua es impenetrable. Esta propiedad se basa en que ese cuerpo ocupa una cierta cantidad de espacio, es decir, tiene volumen, y este tiene un valor determinado. Por ejemplo, el vaso contiene 500 mililitros de agua: este es su volumen, y el del hielo podría ser 3 cc (centímetros cúbicos).

¿Qué pasa si el vaso se cae y se rompe? Se fragmentará en partículas pequeñas de vidrio: es divisible. Gracias a esta propiedad, por ejemplo, los alimentos se transforman, degradan, y los nutrientes son absorbidos por las vellosidades intestinales y pasan a la sangre.

A pesar de romperse y reducirse a partículas pequeñísimas, el vidrio no se destruye, sólo se transforma. Es la propiedad de la indestructibilidad. Cuando el agua de los mares y lagos se evapora, se transforma y luego, se condensa y al llover, vuelve a caer en forma de agua, asegurando así que ese vital líquido no desaparezca.

En las estrellas, la materia química (hidrógeno principalmente) se transforma en energía, en forma de luz, calor, electromagnetismo, y en otras moléculas químicas. Decimos que la materia no se destruye, se transforma.

Otra propiedad muy importante es la densidad, que está relacionada con la masa, el peso y la forma como están agrupadas las partículas en una porción de materia. En la foto observas que líquidos de distinta densidad no se mezclan, el más denso (mercurio) y de mayor masa está en el fondo y el más liviano (alcohol), menos denso, arriba. Encima del mercurio hay agua (menos denso) y encima del agua aceite, menos denso.

¿Cómo haces para endulzar tu jugo?, ¿o tu leche? ¿Cómo hace mamá para salar los caldos? Aprovechamos el hecho de que la materia tiene entre sus partículas y moléculas espacios llamados poros, entre estos se “meten” el azúcar y la sal, se disuelven y permiten endulzar o salar todo el líquido.

Toda materia cumple con la propiedad de la porosidad o discontinuidad.

Aplica lo aprendido

1) En los ejemplos, indico de qué propiedad se trata y justifico.

1.1 En un vaso con agua disuelvo sal.

1.2 Al disolver un porción pequeña de sal en agua, la sal “desaparece”, no aumenta el volumen del agua y esta se vuelve totalmente salada.

1.3 Un fardo de algodón tiene 1 m3.

1.4 Al quemar un fósforo, produce anhídrido carbónico, luz y calor.

1.5 La sal gruesa se puede convertir en sal fina.

1.6 Los témpanos y el petróleo flotan en el agua.