Ensilaje para la conservación de forraje

El ensilaje es el proceso de conservación del excedente de material forrajero, el cual puede ser aprovechado en épocas críticas o cuando se presentan faltantes.

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Es importante efectuar este trabajo durante la temporada de verano, a fin de contar con alimento durante el invierno. Cabe destacar que ante el pronóstico de heladas tempraneras se hace imprescindible conservar las pasturas o granos, lo que evitará que la producción ganadera se resienta.El proceso de ensilaje consiste en la programación de los trabajos en el establecimiento; es decir, programar la siembra del cultivo que se va a utilizar y la plantación del mismo. Algunos materiales forrajeros que se recomiendan son el pasto Camerún, pasto elefante y plantas de sorgo, los que deben estar a punto para efectuar las tareas de conservación. En el caso del sorgo, el grano debe estar en estado lechoso.
Una vez que el material esté apto para el ensilado, las maquinarias son las que realizarán el trabajo. El tractor provisto con cortapicadora realiza el corte fino y bien milimetrado de los materiales forrajeros (que ayudará a la digestión de los animales).

Asimismo, se cuenta con camiones tumba para acarrear todo el material que fue picado en el terreno. Entonces, el tractor con la cortapicadora va por la línea de plantación y con la ayuda de una descargadora pasa directamente al camión tumba, hasta llenarlo con el forraje. Posteriormente, el material se lleva a la fosa para ser guardado.

FOSA DE ALMACENAJE
La fosa es el sitio donde se colocará todo el material forrajero, bien compactado.

Evidentemente, la fosa ya debe estar preparada antes de ensilar el forraje. Debe estar nivelada, con los bordes dispuestos para la carga. El camión tumba echa el material a la fosa, donde se esparcirá uniformemente. Un tractor es el que se encarga de pisotear el forraje para su compactación, quitando el máximo de oxígeno, debido a que la fermentación es anaeróbica, o sea, sin oxigeno. Si se hiciere de otra manera, el material entraría en un proceso de descomposición, lo que daría como resultado la putrefacción del material. Por ello, cada vez que se realiza una nueva carga, el tractor lo va compactando, hasta que la fosa quede llena con el material de la parcela.

DIMENSIÓN DE LA FOSA
Las dimensiones de la fosa para el ensilaje dependen del material que se tenga en el terreno y que será después colocado en la misma. Una dimensión orientativa puede ser la de ser 10 m de ancho por 15 m de largo. Pero la medida o dimensión del ensilaje es variable, porque depende del material que se tenga en el terreno.

TAPADO DE LA FOSA
Al terminar la carga, se procede a cubrir con una carpa o lona de plástico sana todo el ensilado. Es necesario extender debidamente la carpa y colocar sobre los bordes bolsas con arena para que no entre oxígeno. Para preservar la viabilidad de la carpa y protegerla de los rayos solares, se puede poner encima material verde, como pasto Camerún. La carpa no debe romperse, para que el forraje permanezca seguro y no se descomponga.

REUTILIZACIÓN DEL FORRAJE
El material forrajero que se almacenó en el silo puede utilizarse a los 30 días después de almacenado. En algunos casos, el almacenaje puede llegar a dos años, pero evitando siempre el ingreso de oxígeno. Es importante realizar un monitoreo permanente para observar las condiciones del ensilado, cuando lo que se busca es lograr periodos largos de conservación. Si existe alguna avería (rotura o corte) en la carpa, debe solucionarse lo antes posible. Por ningún motivo debe ingresar agua al silo.

IMPORTANCIA DEL ENSILAJE
El ensilaje es una práctica de mucha importancia, atendiendo a que se debe aprovechar las épocas de abundancia para conservar material forrajero y usarlo en las temporadas de déficit. Hay que tener en cuenta que ante la aparición de heladas el crecimiento vegetal es más lento o incluso se queman las hojas o pastos de corte y, al no haber alimento para los animales, disminuye la producción; las vacas están mal nutridas, no entran en celo o no se preñan, y esto repercute en todo el proceso productivo. Por eso es preciso tener una planificación anual de conservación de alimentos para los animales.

TIPOS DE SILO
Existen varias tipos de silo: el tipo torta, que es a flor de tierra; el silo trinchera, que se excava y se entierra en la fosa el forraje; y también el silo bolsa, que, como su nombre lo dice, permite embolsar el material para conservar el forraje.

Aunque el silo bolsa posee un costo más elevado, hay menos desperdicios de forraje; siendo ideal para la conservación de maíz y sorgo, que son ricos en energía y componentes nutritivos. En cuanto a silo trinchera o tipo torta, el desperdicio es de un
10 % aproximadamente.

FERTILIZACIÓN DEL SUELO
En cada período, el suelo para el cultivo de material forrajero debe estar muy bien preparado y fertilizado. Si es posible, se deben fertilizar el cultivo después de cada corte, ya que las plantas absorben los nutrientes del suelo, los cuales se deben reponer constantemente con estiércol de aves (gallinaza) y otros para alcanzar buen crecimiento para los posteriores cortes.

(*) Técnico de la granja Guarapi.
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