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Tan así es que el médico veterinario encargado de autorizar el movimiento de los animales es el principal responsable de todo el trabajo.Para llevar a cabo el trabajo de preembarque y embarque de ganado, o sea, trasladar animales de un establecimiento hasta un frigorífico, el encargado de la autorización debe ser un veterinario registrado en el Ministerio de Agricultura y Ganadería, y uno de los requisitos para que el mismo esté habilitado, es haber cumplido con el curso de habilitación en donde se le asigna un número que le autoriza a confirmar si los animales pueden ser embarcados.
Este número de habilitación se utiliza para sellar a los animales en la espalda, dando de esta forma su visto bueno para el traslado.
PARA EL EMBARQUE
Una de las condiciones para realizar el embarque es que el animal debe estar bien identificado, tanto con la marca del propietario como también con el sello indeleble del veterinario.
Este trabajo de sellado de animales por parte del veterinario representa la certificación de la salud de los mismos y de que son aptos para el consumo humano e incluso para la exportación.
ACTIVIDAD RÁPIDA
PERO SIN CAUSAR ESTRÉS
Es muy importante que el trabajo de embarque se realice con rapidez, pero sin causar estrés al animal; esto quiere decir que se deben evitar los gritos de los peones, la utilización de perros, utilización de palos con puntas para clavar a los animales y que estos se muevan. Lo que se recomienda es utilizar banderolas para que estos se muevan. Cabe destacar que la subida del animal, como también su traslado por varios kilómetros, le causan un enorme estrés, que muchas veces hace que baje de peso.
PROTOCOLOS
A CUMPLIR
Primeramente, el veterinario deberá realizar una inspección ocular al lote de animales que será enviado a frigorífico, en forma general y particular por si hubiera algunas patologías que ameriten el rechazo de los animales. Los animales que no reúnan las condiciones para su envío, como enfermedad, heridas u otros problemas, deberán ser inmediatamente remplazados por otros ejemplares sanos y que sean aptos para el embarque. Una vez que los animales fueron embarcados en el camión, se procede a llenar una guía de traslado y la nota de remisión, donde están todos los datos de los animales que son enviados al frigorífico.
Posteriormente, se realizará el precintado de cada compartimento del camión, para evitar que suban o bajen los animales por el camino, ya que estas precintas son inviolables y solo en el frigorífico pueden ser rotas.
PASIBLE DE SANCIÓN
Es importante señalar que, si el veterinario autoriza por error u omisión el traslado de un animal enfermo o que no reúna las condiciones fitosanitarias establecidas para el embarque, puede recibir una sanción por la que se le despojará de su número de registro como habilitante de embarques.
(*) Técnico del Servicio Agropecuario de la Cooperativa Neuland.
Este número de habilitación se utiliza para sellar a los animales en la espalda, dando de esta forma su visto bueno para el traslado.
PARA EL EMBARQUE
Una de las condiciones para realizar el embarque es que el animal debe estar bien identificado, tanto con la marca del propietario como también con el sello indeleble del veterinario.
Este trabajo de sellado de animales por parte del veterinario representa la certificación de la salud de los mismos y de que son aptos para el consumo humano e incluso para la exportación.
ACTIVIDAD RÁPIDA
PERO SIN CAUSAR ESTRÉS
Es muy importante que el trabajo de embarque se realice con rapidez, pero sin causar estrés al animal; esto quiere decir que se deben evitar los gritos de los peones, la utilización de perros, utilización de palos con puntas para clavar a los animales y que estos se muevan. Lo que se recomienda es utilizar banderolas para que estos se muevan. Cabe destacar que la subida del animal, como también su traslado por varios kilómetros, le causan un enorme estrés, que muchas veces hace que baje de peso.
PROTOCOLOS
A CUMPLIR
Primeramente, el veterinario deberá realizar una inspección ocular al lote de animales que será enviado a frigorífico, en forma general y particular por si hubiera algunas patologías que ameriten el rechazo de los animales. Los animales que no reúnan las condiciones para su envío, como enfermedad, heridas u otros problemas, deberán ser inmediatamente remplazados por otros ejemplares sanos y que sean aptos para el embarque. Una vez que los animales fueron embarcados en el camión, se procede a llenar una guía de traslado y la nota de remisión, donde están todos los datos de los animales que son enviados al frigorífico.
Posteriormente, se realizará el precintado de cada compartimento del camión, para evitar que suban o bajen los animales por el camino, ya que estas precintas son inviolables y solo en el frigorífico pueden ser rotas.
PASIBLE DE SANCIÓN
Es importante señalar que, si el veterinario autoriza por error u omisión el traslado de un animal enfermo o que no reúna las condiciones fitosanitarias establecidas para el embarque, puede recibir una sanción por la que se le despojará de su número de registro como habilitante de embarques.
(*) Técnico del Servicio Agropecuario de la Cooperativa Neuland.