El neumático, goma útil

El neumático no debe ser considerado un desecho cuando termina su vida útil, tenemos que estimular el recauchutaje controlado a los efectos de prolongar su vida útil, con los consiguientes ahorros tanto de dinero como de materia prima.

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Capacidad: Interpreta la utilidad que se puede obtener de neumáticos desechados

Debemos estimular la reutilización de neumáticos granulados en sustitución de piedra y otros materiales inertes, así como en capas asfálticas, aprovechando además que el caucho amortigua los ruidos y da elasticidad al terreno ante cambios de temperatura.


Los neumáticos desgastados de todo tipo de vehículos pueden tener dos fines:
1. Recauchutado (segunda vida) En la fabricación de una rueda de primera mano se emplean 28 litros de petróleo, pero en un neumático renovado o recauchutado, 10 litros.

2. Transformación en otros materiales como goma triturada para:
- parques infantiles (hamacas) y otros juegos.

- pistas de atletismo.

- campos de fútbol.

- hierba artificial para campos de golf.

- material para amortiguar el ruido.

- pastillas de freno para camiones de gran tonelaje o carreteras.

- como combustibles en centrales eléctricas, instalaciones industriales, y principalmente, en fábricas de cemento y cal.

- vallas de seguridad.

- cercos de contención de arena en playas.

- paragolpes para embarcaciones.

- macetas para desarrollar agricultura urbana, etc.


Los neumáticos pueden ser utilizados para reforzar la proa de los botes, como paragolpes.

Entre estas posibilidades técnicas que ofrece su reutilización, troceados o granulados, destacan las que permiten su uso en la construcción de pistas deportivas, vías, revestimientos, aditivos para asfaltos, moquetas, calzado, frenos, muros antirruido, fabricación de nuevos neumáticos, material deportivo, etc. Los neumáticos enteros se pueden utilizar para arrecifes artificiales, puertos, obras de refuerzo de taludes y muros de contención, entre otros usos.


Industrias de reutilización
A partir de la reutilización del neumático se podrán obtener distintos productos, para diversas aplicaciones:
- Producto proveniente del neumático en una primera etapa de trozado, sin separación de tela y metal. De esta manera puede servir, por ejemplo, como combustible para cualquier tipo de caldera u horno que esté adaptado para quemar residuos sólidos sin contaminar el medioambiente.
- Separando las partes del neumático se obtienen metal y residuos textiles reciclables, además de polvo de goma de diferentes granulometrías con el que se pueden obtener productos varios, como por ejemplo: alfombras para piso, lomos de burro, amortiguación en canchas de césped sintético (estas utilizan casi 100 toneladas por cada una), plásticos cargados, picaderos para caballos de carrera (se comprobó que con polvo de goma los caballos tienen menos riesgo de conjuntivitis), pisos de goma y asfaltos (contribuye fundamentalmente a la disminución de ruido y permite aumentar su durabilidad), entre otros.

La tecnología automotriz busca cada vez más eficiencia, pero para ello los neumáticos son esenciales, y sus desechos contaminantes.

Actualmente, en Europa existen empresas con equipos portátiles que realizan el trozado primario en el lugar de depósito, lo que facilita su traslado hasta el lugar de disposición final, permitiendo de esta forma transportar mayor cantidad de neumáticos por camión. Esta modalidad resulta una buena alternativa para evitar la instalación de plantas de tratamiento fijas donde no se justifique la inversión y para llegar a zonas poco pobladas del interior del país.

Asfalto de goma
En Madrid, España, una empresa refinadora de petróleo estudia un proyecto desde hace tres años y quiere llevarlo a la práctica. Se trata de una tecnología que permite la utilización de betún mejorado con polvo de neumáticos reciclados en la fabricación de asfaltos para pavimentar rutas y calles. Además, desde la compañía explicaron que “tiene importantes ventajas medioambientales porque evita la acumulación de ruedas fuera de uso en los vertederos y minimiza el impacto acústico al reducirse el nivel de ruido que produce la rodadura de los coches”. Se estima que la cantidad de neumáticos usados que se tiran en la capital española suma 300.000 unidades al año.

El reciclado de neumáticos usados en carreteras constituye una de las tecnológicas innovadoras desarrolladas por la compañía en la búsqueda de la eficiencia energética. Un neumático necesita grandes cantidades de energía para ser fabricado y provoca, si no es convenientemente reciclado, contaminación ambiental al formar parte, generalmente, de vertederos.

El asfaltado, caro y de vida corta, puede ser mejorado con el uso de restos de neumático.


El proceso de reciclado de neumáticos consiste en trocear los neumáticos y separar todos sus componentes (metales, tejidos y caucho). El material obtenido supone aproximadamente el 80% del neumático. Este material puede utilizarse para fabricar betunes mejorados que mezclados con áridos (gravas y arenas) forman las mezclas asfálticas que constituyen los firmes de las carreteras.
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