El entorno y medio social

El ser humano siempre se relaciona con sus semejantes (amistades o pareja) o grupos (familia, personas con quienes convive en su escuela y comunidad). Los vínculos establecidos con los demás durante la vida, son parte esencial del desarrollo como personas.

Cargando...

De hecho, un individuo se forma gracias a las relaciones que mantiene con otros seres humanos. Hombre y mujer están constituidos por un aspecto biológico, es decir, por el cuerpo y las características propias de la especie humana, como el pertenecer al reino animal, ser un mamífero, etcétera.

Sin embargo, una persona no es solamente su cuerpo y los procesos fisiológicos que se llevan a cabo dentro de ella. También es producto de la cultura: se necesita el lenguaje, los símbolos y la interacción con otros para desarrollar todo el potencial.

En otras palabras, no basta tener físicamente características humanas, sino que tiene que hacerse o convertirse gradualmente en ser humano a través del contacto con la cultura y la sociedad.

La convivencia social no es sencilla. Los conflictos entre personas, grupos y países son comunes, y nunca se estará exento de ellos. Se ha dicho que el ser humano es su peor enemigo -que el hombre es el lobo del hombre- porque, a lo largo de la historia, ha esclavizado, explotado y discriminado a sus semejantes, o no respeta la vida humana y llega a destruirla.

Por otra parte, en las relaciones interpersonales se presentan malentendidos, riñas e incluso luchas por imponer a otro los puntos de vista o deseos personales. Estas situaciones reflejan la naturaleza compleja -y a veces, contradictoria- del ser humano.

A pesar de las tensiones generadas en toda relación por el choque entre los intereses individuales, nadie puede prescindir del otro, de los otros. Los seres humanos necesitan vivir en comunidad y establecer diferentes nexos con otras personas. La sociedad es una trama, es decir, un tejido formado por la red de hilos o conexiones entre cada individuo y los demás miembros de un grupo.

Con estos elementos es posible definir al medio o entorno social como el conjunto de personas que rodean a una persona, y las relaciones que se generan entre hombres y mujeres.

Ahora bien, las relaciones son más o menos estrechas, y dependen de la finalidad o los motivos por los cuales se haya formado un grupo.

Se pueden distinguir tres clases de agrupaciones, según su finalidad:

» Las formadas al azar, sin que intervenga una razón determinada. En ellas, los individuos se han reunido por casualidad; no existe un interés especial por compartir, ni un objetivo común. Por ejemplo, la gente que camina por una calle en cierto momento, un vecindario, el conjunto de automovilistas que conforma el tránsito, las personas que acuden a lugares públicos, etcétera.

» En las que sus miembros comparten intereses y que se reúnen por voluntad propia. Los individuos que conforman esas agrupaciones han elegido libremente pertenecer a ellas para divertirse o lograr un objetivo común. Algunos casos son grupos de amigos, clubes ecológicos, asociaciones civiles y partidos políticos.

» Las formadas por diversos lazos de interdependencia y la necesidad de cooperación entre sus miembros. Los individuos en este tipo de conjuntos no siempre han escogido ser parte de ellos. A veces, la colectividad en cuestión ya existía antes de que naciera la persona, quien entra al grupo sin haberlo decidido. Así se ha llegado a la familia y al país donde se nace.

En otros casos, sí se elige pertenecer a un conjunto dado de personas, como la empresa donde se trabaja o las juntas vecinales en la colonia. Pero el rasgo común, sea que lo se haya decidido o no, es que se pertenece a estos grupos porque hacen falta para sobrevivir y porque se requiere contacto, afecto y ayuda de los semejantes.

Funcionamiento del medio social y valores que le dan cohesión

Mujeres y hombres tienen necesidades de distintos tipos y, en un momento u otro, salen de sí mismos en busca de los demás, tratando de hallar apoyo, consuelo, información, diversión, enseñanzas, etcétera. Sólo conviviendo y trabajando con otros es posible satisfacer la mayoría de las necesidades básicas -comida, vivienda, vestido, educación elemental- y obtener otros elementos que mejoran la calidad de vida: recreación.

Por esas razones, en cualquier grupo social se encuentra que cada persona tiene un propósito, e intenta ver cumplidos sus intereses o deseos. Y para que las diversas agrupaciones y las naciones en su conjunto funcionen adecuadamente, los individuos deben lograr sus fines sin obstaculizar a los demás.

Asimismo, esto es una condición indispensable para que cada mujer y cada hombre alcance su pleno desarrollo, tomando siempre en cuenta que no debe dañar al resto de la colectividad.

Pero, como cada ser humano es único y tiene demandas específicas, es inevitable que surjan conflictos, que se den enfrentamientos de intereses contrapuestos. Nunca falta quien quiera agredir o abusar de personas menos fuertes para dominarlas y conseguir beneficios. Sin embargo, los deseos individuales nunca se encuentran aislados, sino que se enfrentan a las aspiraciones de los demás, como llevar una existencia tranquila o vivir en una sociedad justa.

Además, en ciertas ocasiones, una persona desea lo mismo que otra y, aunque el interés sea similar, hay que competir por obtener aquello que llama su atención.

Para que los conflictos de intereses no derivaran en una guerra de todos contra todos, los diversos grupos humanos establecieron un orden respetado por todos los miembros de sus comunidades; es decir, un conjunto de leyes e instituciones, cuyo fin fuera a resolver los problemas generados entre personas. Así es como nació el derecho, que determina en una sociedad, lo que es permitido y lo que no, así como las sanciones que amerita quien infringe las leyes.

Pero como cada ser humano es único y tiene demandas específicas, es inevitable que surjan conflictos, que se den enfrentamientos de intereses contrapuestos. Nunca falta quien quiera agredir o abusar de personas menos fuertes para dominarlas y conseguir beneficios. Sin embargo, los deseos individuales nunca se encuentran aislados, sino que se enfrentan a las aspiraciones de los demás, como llevar una existencia tranquila o vivir en una sociedad justa.

En suma, si se quiere contribuir a que el entorno sea más equilibrado, a que se viva más a gusto en el, y que se convierta en un ámbito propicio para el crecimiento personal y colectivo, hay que adoptar como máxima de conducta la llamada “regla de oro”, que consiste en: “No hacer a los demás lo que no se quiere que le hagan a uno”.

Algunas características de la sociedad cohesionada son:

» Disfruta de paz porque, para sus miembros, es importante resolver sin violencia los conflictos sociales.

» Su proyecto económico y su sistema de justicia son sólidos, porque la población ha aceptado regirse por ellos.

» Posee instituciones fuertes, porque el conjunto de ciudadanos y ciudadanas las han ido construyendo y les han dado su consenso.

Prosigo mi aprendizaje

Emito opinión acerca de:

» ¿Por qué creo que es difícil la convivencia social?

» ¿Cómo lo vivo a diario la convivencia en mi casa y en el colegio?

» ¿Qué aspectos se deben considerar para manejar los conflictos?

Elaboro: Un mapa conceptual acerca de las características de una sociedad cohesionada.

Propuestas de mejoramiento de convivencia de mi entorno.
Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...