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Cuando los cachorritos cumplen un mes, es el momento oportuno de destetarlos, pues si no lo hacemos, las madres sufren, debido a que ellos ya poseen pequeños dientes filosos que ocasionan lesiones a los pezones de sus madres; como consecuencia, ellas se impacientan y se alejan de sus hijos. De allí en adelante, es necesario cuidarlos con esmero y tener en cuenta un adecuado plan sanitario.Los cachorritos pueden nacer con un parásito llamado "áscaris" en el intestino y, si dentro de la primera semana ó 15 días de vida no se los desparasita, ellos pueden morir. Es muy alto el porcentaje de muerte por parasitosis entre los cachorros; por eso es importante controlar y revisar el color de las mucosas de los ojos y de la boca. Cuando ellos están muy parasitados, las mucosas se ven blanquecinas por la marcada anemia, lo que puede ocasionarles la muerte.
Una buena recomendación es administrar una droga contra los parásitos a la semana de haber nacido y un jarabe antianémico. Esto nos evitará graves problemas.
Si no se les administró el antiparasitario, debemos hacerlo de inmediato al mes, cuando ellos tengan nuevos dueños. Cuando los cachorros cumplan 45 días, se comenzará el plan de vacunaciones normales. En el mercado existen vacunas para enfermedades de la joven edad de los perros que pueden ser aplicadas a partir de los 30 días de vida.
Los cachorritos deben asistir al veterinario, a fin de que este les organice un plan de vacunaciones, con el fin de prevenir un grupo de enfermedades. Si no lo hacemos, no se podrá salvar la vida del animal al enfermarse; por eso las vacunas son muy importantes en todos los animales.
AFECCIONES
MÁS COMUNES
Las enfermedades más comunes que afectan a los canes jóvenes son: la parvovirosis, la corona virus, la hepatitis infectocontagiosa, la leptospirosis, el distemper o moquillo canino, la tos de la perrera y la rabia. Igualmente, se encuentran los parásitos intestinales que son los siguientes: los ancylostomas, las tenias y los áscaris, y los parásitos de la piel como ser las pulgas, piques y garrapatas, tan arraigadas en este momento en los hogares asuncenos; tampoco podemos olvidar a los mosquitos, transmisores de la leishmaniosis, o sea el "karachã".
PULGAS Y GARRAPATAS
El problema de las garrapatas es alarmante y daré algunos detalles. La garrapata del perro se denomina Rhipicephalus sanguineus. Las hembras adultas son las más grandes, y ellas están prendidas a la piel de los animales bebiendo la sangre. La garrapata macho se ubica entre la piel del animal y la garrapata hembra, de espaldas a la piel, de tal forma que su vientre contacte con el vientre de la hembra. Allí, el macho, que tiene un espermatoforo en la boca, lo deposita en el órgano genital de la hembra. Luego la hembra succiona mayor cantidad de sangre, para después dejarse caer al suelo donde busca un sitio para desovar, entre unos tres o cinco días después. El lugar puede ser en el pasto o en cualquier rincón de la casa. La garrapata hembra coloca entre 3.000 y 5.000 huevos, existiendo especies que pueden colocar hasta 18.000 mil huevos de una vez y después muere.
Las garrapatas, a más de las molestias ocasionadas por la infestación, producen un enflaquecimiento progresivo y anemia marcada, a más de trastornos nerviosos. La saliva de la misma tiene una fuerte acción irritante sobre la piel, produciendo procesos alérgicos con intenso prurito al animal.
Las pulgas se alimentan succionando la sangre de los animales. Ellas, al picar en la piel inoculan una proteína con función anticoagulante, fluidificando la sangre para facilitar su alimentación, lo que a su vez ocasiona en la piel de los animales procesos alérgicos.
Una vez que la pulga se alimentó convenientemente, baja a depositar sus huevos en los sitios más concurridos por sus huéspedes. Los huevos son de color blanquecino, mientras que su materia fecal son pequeñas partículas de color negro. Las pulgas desovan unos 200 huevos, que una vez adultas buscan un huésped para alimentarse. Las pulgas están sobre el cuerpo de los animales para alimentarse una sola vez, pudiendo vivir en el ambiente hasta dos meses. Las pulgas son las responsables de la transmisión de la tenia Diphilidium caninum, parasitosis que origina graves problemas a los canes, ocasionando hasta ataques epileptiformes de acuerdo a su infestación. Las pulgas viven en las casas y, si existen en gran cantidad, pueden saltar en masa a las piernas de los humanos; por ello es importante luchar contra esta plaga.
Una buena recomendación es administrar una droga contra los parásitos a la semana de haber nacido y un jarabe antianémico. Esto nos evitará graves problemas.
Si no se les administró el antiparasitario, debemos hacerlo de inmediato al mes, cuando ellos tengan nuevos dueños. Cuando los cachorros cumplan 45 días, se comenzará el plan de vacunaciones normales. En el mercado existen vacunas para enfermedades de la joven edad de los perros que pueden ser aplicadas a partir de los 30 días de vida.
Los cachorritos deben asistir al veterinario, a fin de que este les organice un plan de vacunaciones, con el fin de prevenir un grupo de enfermedades. Si no lo hacemos, no se podrá salvar la vida del animal al enfermarse; por eso las vacunas son muy importantes en todos los animales.
AFECCIONES
MÁS COMUNES
Las enfermedades más comunes que afectan a los canes jóvenes son: la parvovirosis, la corona virus, la hepatitis infectocontagiosa, la leptospirosis, el distemper o moquillo canino, la tos de la perrera y la rabia. Igualmente, se encuentran los parásitos intestinales que son los siguientes: los ancylostomas, las tenias y los áscaris, y los parásitos de la piel como ser las pulgas, piques y garrapatas, tan arraigadas en este momento en los hogares asuncenos; tampoco podemos olvidar a los mosquitos, transmisores de la leishmaniosis, o sea el "karachã".
PULGAS Y GARRAPATAS
El problema de las garrapatas es alarmante y daré algunos detalles. La garrapata del perro se denomina Rhipicephalus sanguineus. Las hembras adultas son las más grandes, y ellas están prendidas a la piel de los animales bebiendo la sangre. La garrapata macho se ubica entre la piel del animal y la garrapata hembra, de espaldas a la piel, de tal forma que su vientre contacte con el vientre de la hembra. Allí, el macho, que tiene un espermatoforo en la boca, lo deposita en el órgano genital de la hembra. Luego la hembra succiona mayor cantidad de sangre, para después dejarse caer al suelo donde busca un sitio para desovar, entre unos tres o cinco días después. El lugar puede ser en el pasto o en cualquier rincón de la casa. La garrapata hembra coloca entre 3.000 y 5.000 huevos, existiendo especies que pueden colocar hasta 18.000 mil huevos de una vez y después muere.
Las garrapatas, a más de las molestias ocasionadas por la infestación, producen un enflaquecimiento progresivo y anemia marcada, a más de trastornos nerviosos. La saliva de la misma tiene una fuerte acción irritante sobre la piel, produciendo procesos alérgicos con intenso prurito al animal.
Las pulgas se alimentan succionando la sangre de los animales. Ellas, al picar en la piel inoculan una proteína con función anticoagulante, fluidificando la sangre para facilitar su alimentación, lo que a su vez ocasiona en la piel de los animales procesos alérgicos.
Una vez que la pulga se alimentó convenientemente, baja a depositar sus huevos en los sitios más concurridos por sus huéspedes. Los huevos son de color blanquecino, mientras que su materia fecal son pequeñas partículas de color negro. Las pulgas desovan unos 200 huevos, que una vez adultas buscan un huésped para alimentarse. Las pulgas están sobre el cuerpo de los animales para alimentarse una sola vez, pudiendo vivir en el ambiente hasta dos meses. Las pulgas son las responsables de la transmisión de la tenia Diphilidium caninum, parasitosis que origina graves problemas a los canes, ocasionando hasta ataques epileptiformes de acuerdo a su infestación. Las pulgas viven en las casas y, si existen en gran cantidad, pueden saltar en masa a las piernas de los humanos; por ello es importante luchar contra esta plaga.