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Objetivo: - Reconocer los diferentes tipos de objetivos que puede tener una comunicación.
Cuando se centra en las características del producto, sus beneficios y sus ventajas frente a la competencia, se denomina comunicación del producto. Sin embargo, cuando promociona la imagen de una organización, sea lucrativa o no, se llama comunicación institucional. Además, dentro de estas dos grandes clasificaciones, nuestra comunicación puede tener como fines informar, persuadir o recordar algo acerca del producto/servicio o la organización.
Definir qué tipo de comunicación necesitamos en ese momento depende del análisis del problema que estamos tratando de resolver. Supónganse que somos una institución educativa (colegio) con 5 años en el mercado y consideramos que el nivel de matriculación del año 2007 ha sido regular con relación con la capacidad de recepción de alumnos que tenemos. De este problema de baja matriculación, debemos analizar las posibles causas: ¿Será que nuestro público objetivo no nos conoce lo suficiente? ¿Reconocerá los beneficios que ofrecemos? ¿Saben por qué debería elegirnos a nosotros y no a la competencia? ¿Cuáles son otras causas de la baja matriculación?
Es decir, hay que definir primeramente si las personas que están dentro de nuestro público objetivo nos reconocen o no como institución educativa y si, en el caso de conocernos, su actitud es favorable o no. Debemos recordar que, en este ejemplo, el público objetivo son los padres de los niños y jóvenes, ya que ellos son los que toman la decisión de compra sobre el servicio educativo.
Ahora, una cosa es lo que nosotros SUPONEMOS y otra cosa es lo que realmente pasa por la mente de este público objetivo. Por ello, es necesario realizar un pequeño estudio de mercado para determinar el grado de conocimiento y el grado de aceptación que tiene tanto la institución educativa como los servicios que presta.
Para continuar con el ejemplo, vamos a imaginarnos que el estudio de mercado da como resultado que, si bien el 70% público objetivo ha oído hablar de la institución, ella no figura entre sus primeras opciones de compra de servicios educativos por ser aún nueva en el mercado. En ese caso, la comunicación debería estar orientada no solo a aumentar el nivel de conocimiento del público objetivo, sino también a revertir el pensamiento de que el hecho de ser nuevos en el mercado nos hace ser menos eficientes en la prestación de los servicios.
En este caso, la comunicación debería ser más bien institucional y resaltar aquellos beneficios que podrían tener los niños al estar en una institución relativamente nueva, como por ejemplo, que la infraestructura edilicia es reciente y cuenta con equipos de última generación. También podría enfatizar que el hecho de ser nueva en el mercado no le resta beneficios a los servicios que prestamos, ya que puede estar dirigida por profesionales de basta experiencia en educación y con profesores no solo de experiencia sino también de mucha formación.
Nuestra comunicación, teniendo en cuenta este ejemplo, también debería apuntar a los testimonios (aquellas personas que ya confiaron en nosotros) a fin de afianzar el hecho de que no sólo lo decimos nosotros, lo dicen los padres de nuestros actuales alumnos.
ACTIVIDAD- Analizo los anuncios que veo en los diarios o en la televisión y determino cuál es el objetivo de cada comunicación.