Diría que el dogma haya sido escuchar la tripa antes que el detalle maniático.
Creo que "Nadie tiene la culpa" es un disco más libre. Quizá un poco más difícil y algo más oscuro que el anterior, ¡pero nunca solemne!
-En canciones como "Nadie tiene la culpa" o "En lo de Clodi" mostrás al Absatz más melódico y hasta "hitero". ¿Qué podés comentarnos de esa seducción lúdico-musical en los estribillos?
-Es cierto, las dos tienen estribillos en el sentido más pop de la palabra. No sé qué decirte, además de que también esa es una parte de mí. Un gran estribillo siempre me gusta y me hace bien.