Este grupo político se halla debilitado profundamente sin poder salir del pozo para enfrentar a los colorados que hace setenta años detentan el poder, cada vez más fuertes y con todos los recursos del Estado para usar a su favor. Es una pena la falta de una oposición firme en el escenario político que no puede estar para debatir y actuar cuando hay corrupción y arbitrariedades. Los otros partidos pequeños también tienen escasos representantes y son pocos visibles ya que los cartistas copan todo el gobierno.
Esta situación no favorece para nada a la democracia donde tiene que existir la pluralidad de ideas y el debate. Aparte se tiene que equilibrar con una buena cantidad de opositores. Sobre todo en el parlamento donde se necesita la disidencia y el antagonismo para el bien de la nación.
Actualmente, los cartistas son mayoría y eliminan a los opositores como lo hicieron con Kattya González el 14 de febrero de este año. Le sacaron su investidura de parlamentaria porque denunciaba actos de corrupción. Los cartistas son mayoría y reúnen todos los votos necesarios.
No podemos hablar de una verdadera democracia porque los cartistas creen que pueden manejar el Estado como una Estancia particular y repartir la torta entre todos los allegados que ya están mejor.
También quieren controlar a las fundaciones porque muchas de ellas hacen campaña contra el gobierno cuando hace mal los deberes. Necesitamos más grupos y organizaciones que vayan a escuelas y colegios a educar a la población sobre sus derechos y obligaciones y aprender a saber elegir a sus autoridades. Si no nos informamos sobre lo que ellos hacen podemos ir todos a la quiebra, ya que no hay fuentes de trabajo y el dinero no alcanza hasta fin de mes. El poder adquisitivo se debilitó bastante y los precios de los alimentos están por las nubes. Los cartistas ya colocaron a toda la parentela y a los amigos en puestos del gobierno con jugosos sueldos. Ya el mismo Santiago Peña dijo en su campaña proselitista que no es el título universitario lo que les permitirá a los jóvenes a encontrar trabajo sino el Partido Colorado. Esto lo cumplieron a rajatabla.
Les prometió estar mejor a su gente y lo cumplió, sobre todo a sus allegados más fieles. Los liberales están en terribles crisis y se pelean como perros y gatos, unos con otros. La oposición no existe, Los cartistas se reparten todo lo que pueden como si el Estado fuera su negocio particular. La gente está dormida y muy pronto vendrán las municipales, donde van a ganar los colorados en la mayor parte de las intendencias. Mientras el pueblo no se levanta y se manifiesta seguiremos con la corrupción y la pobreza. No vamos a cambiar nada.
Si decidimos hoy mismo a informarnos y a reclamar lo que está mal, puede venir un cambio. La oposición la puede ejercer cualquier ciudadano vulnerado en sus derechos. Puede ser joven o adulto, puede ser una maestra o un obrero, puede ser un médico o un emprendedor. Todos los que votamos y pagamos nuestros impuestos podemos ejercer oposición. Con pruebas y con argumentos y en forma responsable.