Cuando otros diputados argumentaban a favor del proyecto uno de los recientemente colorados acusó a sus colegas de decir estupideces y se autodeclaró más inteligente que todos. ¿Y qué podemos esperar del polémico diputado Jatar Fernández Safuán?, se trata del mismo que recaló en el cartismo tras hacer una campaña electoral contra el mismo Partido Colorado.
Ni sus declaraciones en las que admite alegremente que consumió todo tipo de cosas sin impuestos sorprenden ya. Lo que realmente se puede considerar grave fue cuando dijo: “¿Por qué no organizamos algo entre todos, algo que valga la pena realmente? y ver la problemática de lo que son los accidentes de tránsito, ver la problemática del alcohol”.
Ni hablemos del problema del alcohol o de la diabetes, que también mencionó para intentar desviar el debate, pero ¿cómo alguien que está fungiendo de representar a un sector del electorado paraguayo puede mostrarse de manera tan insensible ante la pérdida de vidas a las que puede llevar una enfermedad grave? Qué bofetada a los pacientes y sus familiares que se ven obligados a amanecer en los hospitales, comprar los insumos y rogar que el tratamiento haga el efecto deseado. ¿Cuántas familias vendieron todo con la esperanza de que un hijo o una madre recupere su salud? Y ni hablar de las miles de rifas, polladas, hamburgueseadas, tallarinadas y otros eventos que se hacen para tratar de paliar los numerosos gastos que afrontan día a día.
Estoy seguro que después se dirá que son palabras sacadas de contexto y miles de mentiras y absurdos justificativos como los que estamos acostumbrados a escuchar, pero no se puede decir bajo ninguna circunstancia que la causa que involucra a los pacientes oncológicos “no vale la pena”. Nos referimos a seres humanos que merecen todo nuestro respeto y consideración ante una enfermedad grave que, muchas veces, si no es tratada a tiempo, puede costarles la vida.
Por lo visto que no fue suficiente el rechazo sin dar una solución o proponer una alternativa, Jatar Fernández fue más allá y con sus palabras metió el dedo en la llaga de las miles de víctimas del cáncer. A juzgar por los liderazgos que últimamente “surgen” (o son promocionados) en el oficialismo, que no nos extrañe que este impúdico diputado se convierta próximamente en el líder de dicha bancada o que reciba otro premio mayor.