Este año el complemento alimenticio solo se pudo proveer por unos 70 días, y fue de forma muy irregular, atendiendo que recién en mayo la Gobernación del departamento, institución encargada de dotar de este rubro a las escuelas, pudo realizar la primera entrega, pero solo hasta mediados de julio. Desde entonces, de nuevo, esta interrumpido el servicio.
La administración del exgobernador y actual diputado nacional José Domingo Adorno (ANR) dejo una deuda de más de G. 6.400 millones con la empresa Altaír SA, proveedora de la entrega de estos alimentos, razón por la cual la firma con justa razón se negaba a seguir con el servicio, hasta tanto se logre abonar parte del millonario compromiso.
Cuando deja el cargo Adorno, se produce una crisis política dentro de la Gobernación, debido a que dos concejales se disputaban el cargo de gobernador. Se genera así un gobierno de total anarquía, lo que produce el incumplimiento de numerosos compromisos, entre ellos tal vez el más importante, el de asegurar la alimentación de los niños.
En este departamento se carece de oportunidades laborales, esto debido a que no existen industrias, y los pocos trabajos que las personas consiguen, son las referidas a los establecimientos ganaderos, donde la paga da solo para sobrevivir. Es por eso que resulta imperdonable la acción desleal de estos gobernantes al no asegurar el almuerzo para los escolares de la zona.
En la mayoría de las comunidades, y sobre todo en las poblaciones indígenas, el almuerzo escolar es aprovechado en un 100% por los escolares, y significa una importante ayuda para sus humildes padres, por lo que no tienen por qué pagar estos niños, la culpa de estos ineptos y deshonrados políticos.
De forma urgente, las nuevas autoridades, deben restablecer el almuerzo escolar para los más de 5.000 estudiantes del Alto Paraguay.