Gran parte de la población está agobiada por las deudas generadas por sucesivas crisis que fueron agudizándose con la pandemia y principalmente por el cierre de la frontera, ya que, por décadas, lo único que generaba divisas era el comercio, direccionado casi en forma exclusiva a compradores brasileños.
En las últimas décadas, a pesar de la vigencia de la ley de Maquila, cuyo principal objetivo es promover el establecimiento de empresas maquiladoras que exporten la producción local, muy pocas industrias optaron por establecerse en Pedro Juan Caballero, lo que nos lleva a preguntarnos el motivo.
Otro de los desafíos de la próxima administración municipal es disipar las dudas que surgieron sobre las obras públicas que han sido ejecutados casi en forma exclusiva por empresas ligadas al entorno de la familia Acevedo que, desde hace años, maneja la comuna, bajo la atenta mirada de los concejales que no han demostrado tener al menos la intención de cumplir con la tarea que les fue encomendada de ser contralores.
Además de aclarar la serie de denuncias sobre los supuestos despojos de solares municipales de los que fueron víctimas numerosos ciudadanos sorprendidos en su buena fe y que, a pesar de buscar por todos los medios evitar ser desalojados, no lo lograron, puesto que el grupo de funcionarios municipales implicados se “documentaron” muy bien y contaron con el “apoyo” por no decir complicidad del Ejecutivo.
Estamos a escasos días de las elecciones y la ciudadanía espera que el que sea electo tenga estos y otros temas entre sus prioridades.