Pero para quienes vieron el final de la película y se sorprendieron con el furibundo comunicado del movimiento que lidera Cartes el martes pasado, le explicamos rápidamente que el “Nuevo Rumbo” perdió una vez más en el Senado en su intención de instalar a un leal a sus intereses, con lo cual cosechó su segunda derrota en apenas tres días. El domingo 20 de junio le golpeó fuertemente la reelección del titular del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) Efraín Alegre –un político opositor abiertamente anticartista y muy crítico a ese modelo– y el martes 22 Salomón obtuvo el rekutu.
En el comunicado famoso, Honor Colorado, con la firma de Cartes y otros como el titular de la ANR y de Diputados Pedro Alliana, calificó al presidente de la República Mario Abdo Benítez como “triste e hipócrita”. Suponemos que alguna promesa les hizo Abdo a los cartistas y no cumplió. O que no se iba a inmiscuir en las negociaciones o algo parecido. Pero a oídos de HC llegó seguramente la versión de que el Mandatario estuvo solicitando votos para Salomón (que fue confirmado después por el senador Silvio Ovelar) y ahí surgió el enojo del líder cartista. Además, irritó el pacto con un sector del Frente Guasu, a tal punto que le vinculó con los secuestros.
¿Por qué Honor Colorado quiere manejar también el Senado? La respuesta parece obvia, pero como ya tiene el control de Diputados, le falta la Cámara Alta para tomar políticamente por completo el Congreso Nacional y ubicar a un aliado en la línea de sucesión presidencial, teniendo cuenta que el vicepresidente de la República, Hugo Velázquez, tendrá que renunciar el año que viene para candidatarse a las internas presidenciales.
Otra cosa que podría explicar el enojo del cartismo es que en la “hoja de ruta” de este movimiento figura el juramento de Cartes como senador activo, hecho que no lo pudo consumar el 1 de julio de 2018. Entonces aquí viene otra pregunta: ¿Para qué quiere ocupar una banca si igual ya posee bastante poder político desde su casa? Quizás estará buscando el fuero... vaya a saber para qué.