Ante la falta de un lugar para atender a los ancianos de Pilar, el sacerdote redentorista Gianluigi Aroffo había proyectado la construcción de un hogar con todas las comodidades para brindar cariño y atención a aquellos que principalmente ya no cuentan con ningún familiar en la ciudad.
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Luego de muchos años de espera fue concretado el sueño de toda una comunidad, el de contar con un albergue para ancianos, gracias a la incansable labor del sacerdote redentorista Gianluigi Aroffo, párroco de la basílica Nuestra Señora Del Pilar, presidente de la Fundación de Redentoristas de Obras Sociales y Educacionales del Paraguay ( FROSEP), quien suscribió un convenio con la Gobernación de Ñeembucú para la construcción de las obras.
“Gracias a Dios porque tenemos esta posibilidad de ofrecer un lugar a las personas mayores donde puedan buscar otro tipo de ayuda y de acompañamiento. Este sueño hoy es una realidad y estará al servicio de la comunidad, gracias a la inversión de la Gobernación de Ñeembucú, hoy tenemos un lugar donde podemos ofrecer a los adultos mayores un poquito de ternura, acompañamiento y por sobre todo amistad”, refirió el sacerdote Gianluigi Aroffo.
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El gobernador saliente de Ñeembucú, Luis Benítez (ANR), manifestó su satisfacción al lograr concretar el proyecto. “Es un día inolvidable para la comunidad, esta inversión permitirá ofrecer un lugar seguro y digno, pensado exclusivamente para nuestros abuelitos, a quienes debemos todo”, puntualizó.
El jefe departamental destacó que la administración del asilo estará a cargo de la FROSEP y que ya están solicitando la presencia de 5 monjas para venir al lugar a atender a los abuelos. Dijo que el lugar está preparado para albergar a 25 adultos mayores y que están trabajando para conseguir el equipamiento completo del hogar.
Inversión
El gobernador Luis Benítez mencionó que la inversión superó la suma de G. 1.100 millones. La obra inaugurada incluye la remodelación total de tres cabañas con sistema de iluminación led y piso cerámico; cada cabaña cuenta con tres habitaciones, dos sanitarios, cocina y estar, tanque elevado de agua; cocina comedor con depósito en un bloque totalmente independiente.
Todas las dependencias están comunicadas a través de 130 metros de camineros de 2 metros de ancho, totalmente techados. Asimismo, toda la infraestructura cuenta con accesos inclusivos.
El hogar está situado en el predio de la escuela agraria San Isidro Labrador, administrada por la FROSEP en el barrio “del Este” de Pilar.