“Durante los primeros días de la mordedura son muy pocos los signos clínicos, pero una vez que las bacterias empiezan a multiplicarse aparece celulitis, inflamación local y calor en el tejido afectado”, señala la doctora Celeste Ortiz, veterinaria.
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La veterinaria dice que “Si el foco de infección no se detecta y trata, continua la multiplicación de bacterias y se produce acumulación de pus en forma de absceso”.
“Los lugares característicos son las patas, la cabeza y la base de la cola, los de la base de la cola suelen ser mas dolorosos y pueden causar parálisis flácida temporal de esa zona”, recalca Celeste Ortiz.
Otro signo puede ser pirexia y falta de apetito
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“Los abscesos por mordedura de gato pueden ser superficiales y pequeños sin fiebre o podrían ser grandes, profundos con fiebre y falta de apetito y en algunos casos puede llegar a una septicemia y causar la muerte del gato”, advierte.
“Por esa razón es importante acudir al veterinario ante el primer síntoma del para evitar mayores complicaciones que podrían comprometer la vida del felino”, puntualiza Celeste Ortiz.