“Las hormonas tiroideas son responsables del control de los procesos metabólicos, esta alteración provoca que los gatos que padecen de esta enfermedad quemen energía muy rápido y se observa pérdida de peso a pesar de que el gato ingiera mucho alimento y tenga buen apetito”, explica Celeste Ortiz, médica veterinaria.
Lea más: Animales domésticos pueden ayudar a sus dueños a estar bien
Los signos clínicos son:
- Pérdida de peso.
- Polidipsia que es la sed excesiva.
- Polifagia que es el exceso de apetito.
- Hiperactividad.
Lea más: Las garrapatas son menos comunes en los gatos
- Taquicardia.
- Diarrea o vómito en algunos casos.
- En casos ya avanzados observamos debilidad, letargia y perdida de apetito.
“El diagnóstico confirmamos con análisis de hormonas tiroideas, una vez diagnosticada dicha enfermedad los gatos responden muy bien al tratamiento, por ese motivo es fundamental detectar a tiempo y ante el primer síntoma del felino acudir al veterinario” recalca Celeste Ortiz.