Fundado en 1947 por el actor, director y escritor Jean Vilar en una sociedad que buscaba dejar atrás los horrores de la Segunda Guerra Mundial a través del arte y el encuentro, el Festival de Aviñón es uno de los eventos dedicados al teatro más grandes del mundo y cuenta este año con 35 obras del programa propio y unos 1.600 espectáculos que se desarrollarán en paralelo por toda la ciudad.
"Da mucha visibilidad a las compañías, sobre todo a las pequeñas", explicaban a EFE este viernes los franceses Olivier Pedros y Arthur Bertrand, llegados desde París con la compañía Rostand, mientras buscaban los escasos huecos aún libres para pegar los carteles de su obra 'L'Hôtel des sept', uno de los cientos de espectáculos que se podrán ver en los márgenes de la programación oficial.
Solo equiparable en celebridad y tamaño con el que se celebra en Edimburgo (Escocia), para los aviñoneses el festival es un orgullo y la gente del teatro es recibida, aseguran, con los brazos abiertos.
Unite al canal de ABC en WhatsApp
"El festival es una felicidad, es lo principal. Durante un mes estamos fuera del tiempo, es genial, hay muchos turistas, es un muy buen momento", detalla a EFE Raphaël Milhau, comerciante con una tienda de ropa en el centro, y que cada verano durante el tiempo que dura el evento vende aproximadamente un 20 % de su facturación anual.
Angélica Liddell y el español en un lugar de honor
La encargada de abrir esta edición 78 será la escritora, directora y actriz española Angélica Liddell, que presentará este sábado en el emblemático Patio de Honor del Palacio Papal de Aviñón -el escenario más prestigioso del festival- su nueva obra, titulada 'DÄMON. El funeral de Bergman'.
Liddell (Figueres, 1966) es ya una habitual en Aviñón y será solo la primera de una serie de artistas españoles y de América Latina que desfilarán por la ciudad del sur de Francia, ya que el certamen ha escogido el castellano como lengua de honor de su edición 2024.
En 'DÄMON. El funeral de Bergman', la catalana estará acompañada por los actores y actrices del Dramaten de Estocolmo (el teatro el más importante de Suecia), para bucear en los fantasmas del cineasta Ingmar Bergman, quien escribió el guion de su propio funeral como si fuera su última obra maestra.
También habrá obras y artistas de países como Chile, Uruguay o Perú, aunque los países hispanos más representados en cuanto a número de producciones serán Argentina y España, en un viaje que no solo explora la riqueza patrimonial del castellano, sino también su carácter de lengua colonizadora.
Además de los 35 espectáculos oficiales, entre los que también destacan propuestas 'Hécube, pas Hécube' -escrita y dirigida por el director del festival, el portugués Tiago Rodrigues, con intérpretes de la prestigiosa Comédie-Française- o una revisión del 'Quijote' a cargo de Gwenaël Morin, el festival propondrá también dos exposiciones, charlas y lecturas.
El cierre será el 21 de julio también en español, con la cantante Silvia Pérez Cruz y un concierto realizado en colaboración con el festival Les Suds, de la vecina Arlés.
Movilizados contra la ultraderecha
Este 2024, el certamen tuvo que adelantar ligeramente sus fechas tradicionales, a fin de no colisionar con la organización de los Juegos Olímpicos, que comenzarán en París el 26 de julio.
Pero además, esta edición se ha topado con la inesperada convocatoria de elecciones legislativas, a raíz de la decisión del presidente francés, Emmanuel Macron, de disolver la Asamblea Nacional tras el triunfo de la ultraderecha en los últimos comicios europeos.
Los franceses tendrán su primera cita con las urnas este domingo, un día después de la gran apertura, y la segunda ronda se celebrará el 7 de julio.
Pese a ello, el director del evento, el portugués Tiago Rodrigues, asegura que el festival no solo no será un obstáculo para la votación, sino que además animan a la población a movilizarse para evitar una victoria del partido de Marine Le Pen, favorito según las encuestas.