Italia endurece las normas y sanciones de tráfico, también para los monopatines eléctricos

Roma, 20 nov (EFE).- El Parlamento italiano ha aprobado este miércoles un nuevo código de circulación que aumenta las sanciones por conducir usando el teléfono o en estado de embriaguez, así como endurece las normas para el manejo de monopatines eléctricos.

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El nuevo código, propuesto por el Gobierno derechista de Giorgia Meloni, ha sido aprobado en el Senado por 87 votos a favor, frente a los 47 contrarios y una abstención, convirtiéndolo en ley, pues la medida ya superó su tramitación en la Cámara de Diputados.

El ministro de Infraestructuras y Transportes, Matteo Salvini, principal impulsor de la nueva legislación, aseguró que con la misma habrá "más seguridad y prevención, lucha contra los abusos y las malas conductas" al volante y "normas actualizadas".

Conducir vehículos mientras se utiliza el teléfono conllevará multas de entre 250 y 1.000 euros (264-1.056 dólares) y la suspensión del carné de conducir durante una semana, así como la pérdida de 10 puntos del mismo.

En caso de reincidencia la multa asciende a 1.400 euros (1.579 dólares) y el permiso de conducir puede llegar a retirarse por tres meses, además si el uso del móvil provoca un accidente las penas serán más severas.

Los monopatines eléctricos tendrán que llevar una matrícula visible y sus conductores deberán usar casco y estar asegurados. En caso de ausencia de documentos, las sanciones serán de hasta 400 euros (422 dólares).

Además, estos vehículos no podrán salir de los centros urbanos y estarán obligados a usar intermitentes para girar y frenar. El incumplimiento de esta norma acarreará multa de hasta 800 euros (844 dólares).

Las sanciones por conducirlos borracho serán de 2.170 euros (unos 2.290 dólares) y la suspensión del carné de 3 a 6 meses si el nivel de alcohol en sangre es entre 0,5 y 0,8 gramos por litro.

Si asciende a 1,5 gramos, la penalización se duplica y también se prevé el arresto de hasta 6 meses.

Si se conduce con una tasa de alcoholemia superior a 1,5, el conductor será castigado con penas de entre seis meses y un año de prisión y multas de hasta 6.000 euros (6.337 dólares), así como la suspensión del permiso de circulación entre uno y dos años.

Además, aquellos conductores que superen un índice de alcohol en sangre de 0,8 solamente podrán conducir vehículos que instalen un sistema 'alcolock', un dispositivo que mide la tasa de alcohol cuando el conductor sopla en la parte trasera del coche y solo podrá arrancar si este no detecta la sustancia.

Quienes abandonen animales en la carretera serán castigados con la revocación del carnet de conducir o la suspensión durante un año.

También aumentarán las sanciones para quienes estacionen en los aparcamientos reservados para personas con discapacidad, con multas de hasta los 990 euros (1.045 dólares), así como en los carriles o paradas de autobús.

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