“Sin embargo, hay que tratar de no dejar que los elogios se conviertan en el centro de la comida. El objetivo es animar a los niños a comer verduras porque le gustan, no porque quieran elogios y recompensas de parte de los padres”, señala la nutricionista Carolina Sosky, especializada en diversas áreas como en trastornos de la alimentación, inmunonutrición, nutrición deportiva y nutrición infantil.
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La nutricionista recomienda que los niños y niñas participen en la cocina con verduras.
“Al involucrar a los niños en la planificación y preparación de comidas familiares con verduras, es más probable que quieran comer las verduras que ayudaron a preparar”, manifiesta Carolina Sosky.
Por ejemplo, podría dejar que:
- Elija las verduras para la cena al hacer la compra.
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- Que ponga las verduras picadas en la vaporera o cacerola antes de cocinarlas.
- Que coloque las rodajas de pimiento, tomate y champiñones sobre una base de pizza.
- Que lave y mezcle las hojas de ensalada.
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- Los niños mayores pueden ayudar a rallar o picar verduras cuando sienta que pueden manejar con seguridad herramientas de cocina más afiladas.
- Llevar a los niños de compras cuando pueda. Ver muchas verduras diferentes puede hacer que los niños sientan más curiosidad e interés por probarlas.