Un intenso debate se instaló en las redes sociales en torno a la invitación de una boda en la que expresamente los novios avisaban que a su fiesta los niños no estaban invitados.
Una usuaria de Twitter compartió la captura de una conversación de WhatsApp donde se puede leer un chat entre dos personas en el que una de estas dice a la otra que “donde mis hijos no son bienvenidos, yo tampoco”, en respuesta a la invitación a la boda que expresa “sin niños”.
No trascendió el contexto del envío de la invitación ni la respuesta de la novia aludida, pero de igual forma el tema se instaló en redes y los usuarios comenzaron a opinar sobre el punto.
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Una buena parte de los internautas expresó su aprobación a la decisión de la pareja de avisar a sus comensales que la invitación era exclusiva para los adultos, mientras que otros se posicionaron a favor de los padres que afirmaron que para este tipo de eventos sociales deben ser considerados como familia, sin excluir a sus miembros.
¿Deben o no ir niños a las bodas? Lo que dice el protocolo
El tema de invitar o no a los niños a las bodas es una discusión muy común a la hora de planear una boda y de seguro cada pareja deberá considerar un sinfín de particularidades, pero ¿qué dicta el protocolo para estos casos?
Julia Redick, asesora experta en protocolo y ceremonial, despejó dudas sobre el punto. Según explicó, para las bodas y eventos sociales del mismo tipo lo establecido es invitar a los niños del primer anillo de los novios, es decir, a los sobrinos directos de la novia o el novio. “Cuando los niños son de la familia muy cercana, del primer anillo de la novia son los que asisten. Los otros, de ninguna manera”, señaló.
Aclaró que se debe entender que el primer anillo no contempla a los hijos de los primos, de amigos y/o parejas invitadas.
Indicó que si la pareja invitada no tiene con quién dejar a sus niños en la noche en que se realiza la fiesta, deberían optar por no acudir porque no es correcto “imponer” más invitados a un evento planeado. “No deben llevar a los niños, ni tampoco ir”, acotó.
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Invitaciones con datos específicos
Igualmente, resaltó que en las invitaciones de bodas, los novios estipulan la cantidad de personas, el “dress code” y otros detalles particulares de la celebración y que es fundamental que los invitados cumplan con lo indicado, pues de ello depende la realización del evento conforme a lo planificado, entendiendo que al tratarse de una celebración con la cantidad de comensales se calcula el menú y las bebidas así como la disposición de lugares en las mesas y otros.
Sobre el tema de los niños, insistió en la importancia de no llevarlos si no están invitados, puesto que no habrá espacio físico previsto para que estén cómodos, ni comida prepara para ellos y tampoco entretenimiento.
Niños en los restaurantes: depende la educación de cada uno
Otro punto sobre el que Redick habló es sobre llevar o no a los niños a los restaurantes. Al respecto, expresó que si se trata de un evento en el que solo estarán adultos lo ideal es dejar a los chicos en casa; sin embargo, de ser un encuentro familiar o de amigos en las mismas condiciones, es decir, también con hijos, se los puede llevar, siempre y cuando mantengan un comportamiento debido.
“Depende de la educación que se les da a los niños en casa, siempre depende de ello. Llevarlos o no a un restaurante depende de cómo se van a comportar los niños durante el tiempo que estén en el sitio, atendiendo que habrá otros comensales y personas”, concluyó la asesora.