La microbiota intestinal es el conjunto de microorganismos que conviven en nuestro tracto intestinal.
Lea más: Los probióticos y la importancia de cuidar nuestra microbiota
Son sumamente importantes ya que cumplen funciones como degradación y absorción de alimentos proporcionando enzimas y sustratos, funciones de protección metabólica que ayudan en la absorción de vitaminas como calcio, magnesio, hierro.
También aportan funciones de defensa, aumentado o disminuyendo la inmunidad, haciendo de barrera intestinal evitando la proliferación de agentes patógenos o dañinos para nuestro cuerpo.
La microbiota es indispensable para el correcto crecimiento corporal, el desarrollo de la inmunidad y la nutrición agregó la licenciada en nutrición Noemí Brítez.
Signos de la microbiota dañada
La licenciada Brítez indicó que para poder saber si estamos con la microbiota intestinal en equilibrio o no, necesitamos chequearnos descartando algunos ítems como pueden ser:
Lea más: Hallan diferencias en la microbiota intestinal de las personas con depresión
- Hinchazón abdominal.
- Estreñimientos frecuentes.
- Cólicos intestinales.
“Estos indican desequilibrio en la microbiota, por ende, se ven afectadas las principales funciones ya mencionadas” destacó la profesional.
¿Cómo ayudamos a conseguir nuestro peso saludable?
Para la nutricionista, primeramente se debe identificar qué tipo de alimentos estamos consumiendo, descartando los mayormente procesados, azucarados o con altas concentraciones de harinas refinadas, evitar las grasas trans que encontramos en bollerías, etc, ya que estos dañan en gran medida estos microorganismos produciendo desequilibrio, y no aprovechando los nutrientes de los alimentos reales, con esto lleva una mala absorción tanto de calidad y calórica, lo que a la vez dificulta llegar al peso corporal ideal, ya sea por exceso o no de correcta absorción.
“Buscamos el balance microbiano cambiando los hábitos, preferir alimentos reales, (prebióticos) frutas, verduras y vegetales, grasas saludables como los frutos secos, aguacate, proteínas de alto valor biológico como huevos, carnes, también implementando probióticos (alimentos fermentados) como, por ejemplo, chucrut, kimchi, combucha, estos ayudan al crecimiento de microorganismos benéficos” dijo.
También se puede ayudar con factores externos como, realizar actividad física regularmente, el buen manejo del estrés y llevar un buen descanso.
Recetas fáciles para mejorar el estado de la microbiota
Licuado verde
Ingredientes
- 1 mazo de perejil.
- 1/2 manzana verde
- 1 trozo de pepino
- Jugó de 1 limón.
- 1/2 cucharada de semillas de chía.
- Estevia a gusto.
- Hielo
Preparación
1- Limpiamos bien los vegetales y la manzana, troceamos y llevamos todo junto a la licuadora junto con las semillas de chia para prehidratar.
2- Agregar la Estevia y el hielo.
3- Se sugiere consumir en ayunas para aprovechar los beneficios en el tracto digestivo, ideal para las personas con estreñimiento, diabetes, o para enriquecer la dieta con vitaminas y minerales.
Crakers de harina de linaza
Ingredientes
- 1 taza de harina de linaza.
- Agua tibia cantidad necesaria.
- Opcional, sal, condimentos o si prefiere dulce, stevia.
Preparación
1- Agregar de a poco sobre la harina de linaza el agua tibia, ir mezclando hasta logra una masa maleable.
2- Formar un bollo y colocar sobre un papel manteca, sobre la masa colocar otro trozo de papel manteca que nos servirá como antiadherente, extender la masa con un palo de amasar o una botella lisa hasta conseguir el grosor que queramos.
3- Retirar el papel manteca superior.
4- Cortar la masa con cuchillo y colocar con la ayuda del papel manteca inferior en una placa para horno, previamente calentado.
5- Cocinar a temperatura media hasta que estén secas evitando tostar.
Copa de yogur natural y frutos rojos
Ingredientes
- 1/2 vaso de yogur natural sin azúcar.
- Frutos rojos sin azúcar, pueden ser las congeladas.
- Stevia.
Preparación
1- Mezclar el yogur natural con la stevia a gusto, colocar en una copa.
2- Agregar dos cucharadas de los frutos rojos por encima, preferentemente refrigerar antes de consumir.