Así lo ha explicado en una mesa redonda en Binómico, el I Congreso Gastronómico Iberoamericano que se celebra en Huelva (España), Lázaro Rodríguez, consultor para el Plan Iberoamericano de Gastronomía y Alimentación Sostenible (PIGA 2030) cuya aprobación está prevista que se produzca a finales de noviembre en República Dominicana.
Rodríguez ha explicado que para llegar a un consenso entre los 22 países se ha hecho durante dos años un ejercicio para entender "cómo la gastronomía puede acelerar la consecución de los ODS y al mismo tiempo que esa Agenda 2030 puede ayudar a valorizar socialmente la gastronomía y movilizar recursos para el sector y que este tenga más incidencia en la política pública".
Uno de esos objetivos tiene que ver con la igualdad de género y a él se ha referido Lucía Freitas, la chef del restaurante A Tafona, quien ha defendido la cocina como dinamizadora del cambio y "del cambio en cuestión de género, de posicionar a la mujer donde siempre ha estado pero sin que se haya reflejado su talento", ya que lo ; lo que se busca es "dar la vuelta a la tortilla, equilibrar la balanza y colocar a la mujer en el lugar en el que se merece".
Respecto a la colaboración público-privada en el ámbito gastronómico, el director general del Basque Culinary Center (BCC), Joxe Mari Aizega, ha indicado que la Agenda 2030 tiene objetivos que "vienen a sumarse a la visión de 360 grados que de la gastronomía se da en la institución", como "un sector poliédrico con dimensiones sociales, culturales, económicas y medioambientales".
Ha avanzado que el BCC y la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB) están ultimando un informe en el que se argumenta la contribución que la gastronomía puede tener a la consecución de los ODS y de esta forma "ser un instrumento útil para crear una sociedad mejor y con más oportunidades".
También ha abordado esta cuestión el director general de la Industria Alimentaria del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) de España, José Miguel Herrero Velasco, incidiendo en uno de los ODS referido al consumo responsable y la lucha contra el desperdicio alimentario.
Ha indicado que "en los hogares españoles 26 millones de kilo/litros de alimentos a la semana van a la basura -más de 1.300 millones al año-, algo que es insostenible desde el punto de vista ético, medioambiental, social y económico" de ahí que se esté trabajando en un proyecto de ley que va a prevenir las pérdidas y el desperdicio alimentario.
Herrero ha subrayado que se ha de promover "una gastronomía sostenible, sana -educar en buenos hábitos de consumo-, y segura" y en ello es clave la interrelación de todos los actores.