La denuncia realizada en la subcomisaría 46ª refiere que los vehículos estaban en el estacionamiento de la Facultad de Filosofía, mientras los dueños se encontraban trabajando.
Uno de los rodados afectados es de la marca Nisssan Frontier, chapa CFV 390, propiedad de Édgar Ramón Franco Meza (46), y el otro de la marca Toyota IST, chapa CEO 265, de Natalia Lorena Aranda Reyes (30).
De los vehículos fueron sustraídos documentos de las víctimas, una notebook, un “speaker”, dispositivos de almacenamiento, una campera y la suma de G. 500.000.
Una vez consumados los hechos, los delincuentes abandonaron el predio sin inconvenientes, pese a que la universidad cuenta con guardias de seguridad en los dos portones.