Los vecinos se autoconvocaron frente a la sede policial para exigir justicia por la muerte de Máximo Ramírez Aguirre (53), apodado cariñosamente como “Pichu” en el barrio.
En la madrugada del viernes pasado, tras sufrir lesiones graves, Ramírez Aguirre fue auxiliado por bomberos hasta el Pabellón de Emergencias Médicas, donde se produjo su deceso. El diagnóstico médico señala que la causa de muerte fue por traumatismo encefálico leve, a raíz de una lesión en la cabeza.
La Policía no tramitó las diligencias investigativas preliminares, ante la presunción de que la víctima se había desvanecido y, al caer, se golpeó la cabeza.
Cuestionan demora policial
Sin embargo, esa versión es rechazada por los moradores quienes tienen sospecha que Ramírez Aguirre fue asesinado para fines de robo. Los vecinos cuestionaron la demora policial para iniciar las averiguaciones y denunciaron que la escena del hecho fue alterada mediante una limpieza para sacar los rastros de sangre.
Un vecino, que pidió el anonimato, dijo que Ramírez Aguirre fue asaltado por ladrones del mismo barrio, quienes hasta ofrecían las pertenencias de la víctima.
Tras la protesta de los vecinos, los agentes del Departamento de Investigación de la Policía se trasladaron al barrio para las pesquisas.