Hace dos semanas, Jorge Prado abandonaba dolorido el Gran Premio de Italia tras verse involucrado en una caída múltiple en la salida, teniendo que afrontar la gira asiática con 34 puntos de desventaja sobre Gajser.
En la pista de Lombok, el español quiso darle un giro a la fortuna y se tomó una primera revancha para tratar de reconquistar la placa roja de líder del campeonato del mundo.
En Indonesia, Jorge Prado logró su séptima victoria del año y lo hizo mostrando en todo momento un gran ritmo sobre un circuito especialmente complicado.
El Mundial es ya solo cosa de tres, metiendo en esa terna al neerlandés Jeffrey Herlings, al que su exceso de pundonor le llevó una vez más al suelo cuando ya había ganado la primera manga y lideraba la segunda. Justo lo contrario de lo que hizo Prado, que fue segundo en la primera y esperó su momento para dominar la segunda y hacer sonar el himno español en el podio.
El líder de la general, Tim Gajser, mostró su lado más frágil. Se vio superado por sus rivales en la primera manga y en la segunda se fue dos veces al suelo, no pasando de la quinta posición. De hecho una de las caídas se produjo cuando Prado le superaba y él golpeó con su rueda delantera la moto del gallego.
Gajser mantiene el liderato con 555 puntos, frente a los 533 de Prado, que ha reducido doce en una sola prueba.
"Estoy súper contento con el fin de semana y con mi rendimiento. Ha sido muy duro porque hacía mucho calor, la pista estaba muy traicionera y porque he tenido que remontar después de salirme de la pista en la primera vuelta. Yo siempre tengo el objetivo de ganar y fue un duro golpe abandonar en Italia, pero ya estoy repuesto, estoy en forma y he recuperado bastantes puntos. Ahora toca descansar y seguir entrenando para la siguiente prueba aquí en Indonesia", dijo Prado, al término de la prueba.