Pilar dista 358 kilómetros al sur de Asunción, a orillas del río Paraguay. Fue fundada por el gobernador Pedro Melo de Portugal el 12 de octubre de 1779 con el nombre de Villa Ñeembucú.
Aquí nació el poeta Carlos Miguel Jiménez, dueño de los versos más hermosos de la música paraguaya, como Flor de Pilar, Muchachita Campesina, y Mi Patria Soñada, este último declarado himno del duodécimo departamento.
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Por aquí pasó el héroe nacional Mcal. Francisco Solano López durante la Guerra de la Triple Alianza, quien a más de dirigir a sus tropas tuvo tiempo para brindar amor a su “Perla del Sur”, Juanita Pesoa, a quien conoció, según los historiadores, en la ciudad de Yabebyry, departamento de Misiones. La casa donde vivió Juanita Pesoa aún permanece en la ciudad de Pilar, sobre la calle Paolo Alberzoni y Teniente René Ríos.
Según la historia, Juanita Pesoa fue el primer amor de Solano López, con quien tuvo 3 hijos: Emiliano Víctor, Adelina Constanza y José Félix.
El visitante puede conocer el museo del Cabildo, donde se guardan piezas históricas y enfrente se encuentra la plaza Mariscal López, con una hermosa sombra y bancos para descansar con la familia.
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A metros del lugar está la Basílica menor Nuestra Señora del Pilar, cuya obra arquitectónica es admirable. Totalmente revestido de mármol italiano, el templo fue construido con aportes europeos y con la ayuda de la comunidad pilarense.
El turista puede recorrer y conocer la futura costanera a orillas del río Paraguay, que va teniendo forma y que contará con un mirador y desde aquí se puede observar el hermoso atardecer. Muchas familias optan por hacer su caminata sobre el muro cada día.
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La ciudad cuenta con otros atractivos como Yegros Paso. Aquí, a la orilla del arroyo Ñeembucú, engalanado con el yacaré yrupé, que emite una frescura a la vista. A orillas del río Paraguay se cuenta con playas del Club Deportivo Pilarense y la playa Caballero Paso, entre otras.
Pilar cuenta con excelentes hoteles y con hermosos restaurantes para cada paladar exigente: el restó Humaitá de las Hortensias, el Restaurante Corona o Míster Combi son algunas opciones para degustar exquisitos platos. Y para degustar las picadas, pizzas, hamburguesas o lomitos, uno puede pasar por Acuario Gastronomy, sobre la avenida principal de la ciudad.
Si uno quiere probar los más exquisitos platos tradicionales, como vorí vorí, o el caldo de pescado, hay que visitar el comedor Ña Chiquita del Hotel Vera, ubicado en el centro de la ciudad.
Entre otras cosas, a Pilar se le conoce también como “La ruta del pescado”. Aquí todas las pescaderías cuentan con variedad de pescados, desde el mandi’i (bagre) hasta el dorado y el surubí.