Dejó el cargo el ministro Cesar Rossel, de extracción liberal, en cumplimiento a la Ley 635/95 que reglamenta la Justicia Electoral. El principal “logro” dejado por el saliente ministro es la presentación de dos proyectos de ley de modificaciones de las leyes electorales, sin embargo, a asumir prometió una restructuración de la institución y optimización de los recursos humanos, pero poco o nada se avanzó con eso.
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Todo el 2024 estuvo marcado por las contrataciones del personal, mientras que los funcionarios permanentes seguían comisionados en otras instituciones, desangrando el presupuesto del TSJE pero no prestaban funciones allí. También los viajes, al exterior para ministros y funcionarios de alto rango fue una constante durante el año pasado.
Por otro lado, en la citada resolución se designa al ministro Jorge Bogarín González como vicepresidente de la Justicia Electoral y al ministro César Rossel, como miembro del TSJE.
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El reglamento electoral establece que el cambio de la presidencia y vicepresidencia se debe realizar de manera anual, entre sus miembros. En el 2023 estuvo Jorge Bogarín González.
De esta manera el cartismo de manos de Jaime Bestard vuelve a estar a cargo de la institución encargada de organizar las elecciones en nuestro país, en un año sumamente clave, cuando se deberá definir los procedimientos a ser tenidos en cuenta para las elecciones municipales del 2026 y elaborar el cronograma electoral.