Mientras los legisladores están a poco de otorgarse un autoaumento de G. 5.000.000, en los hospitales de casi todo el país, médicos y enfermeros ponen la cara para llevar adelante un sistema de salud cada vez más precario y con necesidades, a lo cual le están haciendo frente vendiendo pan dulce.
Con respecto a esta situación, el doctor Diego Gamarra, coordinador de Terapia Intensiva del Hospital Niños de Acosta Ñu, señaló: “A estas alturas ya no sorprende. La impronta del Poder Legislativo es esa en ese momento y al parecer, en lugar de posicionar las necesidades de la gente ante todo, posiciona sus propias necesidades. No creo que en estos momentos el salario de los parlamentarios sea una prioridad para este país”.
A seguido manifestó: “Eso, incluso más allá de lo que señala el propio presidente, que a veces tiene posturas ambiguas, pero en este caso le escuché decir que resultaba hasta inapropiado que un poder del Estado se autoasigne aumentos salariales en este momento”.
En otro momento, Gamarra explicó que las necesidades en los hospitales siguen siendo las mismas. “Son los médicos y las enfermeras los que tienen que dar la cara por un sistema de salud, que está sufriendo una crisis de disponibilidad de medicamentos e insumos, que se está prolongando más allá de lo esperado, para un cambio de gobierno”.
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“En el servicio de cardiología nosotros estamos vendiendo pan dulce para poder solventar los gastos del servicio, los cuales son muy altos y no alcanza en lo que nos proveen en términos de insumos y medicamentos. Esto es algo que se ve en gran parte de los hospitales del país”, graficó la situación el coordinador de Terapia Intensiva del Hospital Niños de Acosta Ñu.
Para Gamarra, con esta situación, el mensaje que se le da a la gente es que para un grupo de gobierno existen todos los recursos y para el resto de las personas, una negativa que se reitera año tras año.
Una gran equivocación
“Uno se pregunta, ¿cómo es que los legisladores no sean capaces de poner a la gente en primer lugar y ponerse a ellos mismos, y a su grupo político, por delante de todo el resto?”, comentó el doctor Gamarra.
Luego añadió: “En este momento hay que tener una mirada reflexiva y decirlo con claridad. El Gobierno y las autoridades en general se están equivocando y le están tocando la oreja a la gente. En algún momento pueden llegar a reaccionar mal, porque pasa por un montón de necesidades que son históricas en términos de salud o en términos de educación o en términos de pobreza”.
En lo que respecta al gremio de médicos, apuntó que desde hace 12 años que tiene exactamente el mismo salario. “No hay variación importante en el salario de los médicos, que desde el 2013 hasta el 2023, la variación inflacionaria en este país tiene una sumatoria del 50%. Eso quiere decir que el salario de los médicos disminuyó un 50% en su capacidad de compra”.
“Hay que dar un golpe de timón y poner a las personas en el centro, porque de lo contrario, en algún momento las cosas pueden empeorar. La gente está sobreviviendo, la gente la está pasando mal”, finalizó.